Alerta agrario por un proyecto para subir las retenciones

La presentación de un proyecto de ley para aumentar las retenciones a la exportación de soja al 35% y las de subproductos oleaginosos al 30% provocó la reacción de la cadena de producción agropecuaria, que está dispuesta a "salir a la calle" en caso de que la iniciativa avance en la Cámara de Diputados.

El proyecto fue presentado por el diputado del ARI Mario Cafiero y propone subir el impuesto a las exportaciones de poroto y los subproductos, que actualmente pagan un 23,5% y un 20% respectivamente. El fundamento de la iniciativa es crear un diferencial impositivo para producciones "amenazadas" por el avance de la soja, como el arroz, el maíz y el girasol.

El proyecto Cafiero al argumentar a favor de la iniciativa que propone los siguientes puntos:

* Subir las retenciones a la exportación para soja al 35% y de subproductos para el 30%.

* Se autoriza al gobierno a disminuir progresivamente el gravamen cuando el precio internacional sea inferior a los 140 dólares por tonelada.

* Los fondos retenidos se destinarán a crear un fondo fiduciario para el desarrollo agrario, que tendrá como objetivo apoyar a productores de menos de 300 hectáreas para que produzcan bienes destinados al mercado interno y al consumo popular.

Si bien la iniciativa no corresponde a un legislador del oficialismo, los dirigentes de las entidades agropecuarias temen que se trate de "un globo de ensayo" para explorar el camino de una suba de las retenciones a la oleaginosa.

Miguel Calvo, presidente de la Sociedad Rural de Rosario, fue el primero en abrir fuego. Aseguró que "una iniciativa de esta naturaleza sólo puede salir de alguien que perdió contacto con la realidad". El dirigente impugnó especialmente varios puntos de la iniciativa. A saber:

* Agranda el diferencial arancelario que castiga las exportaciones de poroto sin procesar a cinco puntos porcentuales.

* Si el fundamento es preservar la reducción de siembra de otros cultivos, "cabe recordar que esas producciones cayeron por la presión fiscal y por la creación del IVA diferencial".

* La autorización a reducir los derechos de exportación cuando los precios sean menores a los 140 dólares "es fijarle un techo a la rentabilidad que puede tener el empresario agropecuario".

* Se va a detener "el proceso de recuperación del interior para transferir más recursos al Estado central".

* La pérdida de rentabilidad por efecto de l presión fiscal "acelerará la corriente que ya se detecta de salida de capitales del sector agropecuario al exterior para comprar o arrendar campos en Uruguay, Brasil y Bolivia".