A fuerza de goles

Hoy no quedan dudas que José Vizcarra es el jugador más desequilibrante de Central. El Chino ayer volvió a desplegar su instinto asesino en el área rival y clavó dos puñaladas que perforaron la resistencia del arco sanjuanino. Con estas dos perlas de buena factura el máximo artillero en la historia de las inferiores canallas llegó a 9 goles en el Apertura. Es una cosecha extraordinaria para un pibe de perfil bajo que cuando entra al área no tiene piedad.

   “Siempre soñé con llegar a ser el goleador de Central. Estoy muy contento y espero que continúe la racha positiva”, confió luego del partido Vizcarra, un producto genuino de la cantera auriazul que a fuerza de goles comenzó a ganarse el afecto del pueblo canalla. “Qué jugador es Vizcarra”, expresaron anoche una y otra vez los hinchas mientras se retiraban eufóricos del Gigante de Arroyito.

   A la efectividad en las redes rivales, Vizcarra agregó ante los sanjuaninos una gran participación en el circuito futbolístico de tres cuartos en adelante. Fue incontenible para los centrales y siempre intentó triangular con sus compañeros cuando no podía eludir al marcador. En la primera conquista fue a buscar convencido al corazón del área un centro atrás de Papa y remató alto sobre el palo derecho. En su segundo gol (el tercero de Central) ganó en velocidad y fusiló a Monasterio entrando al área desde la derecha.

   “A uno siempre le gusta convertir. Por suerte esta vez los goles sirvieron para ganar y lo disfruté muchísimo”, remarcó el delantero. Y agregó: “Puede ser que este haya sido mi mejor partido en la primera de Central. Los goles te renuevan la confianza y siempre querés tener la pelota”.

   A pesar de que los números hoy le sonríen, el Chino la tiene clara: “No me siento un titular inamovible. Los goles dan un crédito importante, pero si te quedás te comen enseguida. Hay que seguir trabajando”.