La sentencia no fue por discriminar

El fallo que condena al médico del Sies que atendió a Sergio Arias y al municipio, del que depende ese servicio de emergencia, no alude a discriminación. “En el fallo no se menciona un acto de discriminación, pero el tema sí aparece en las audiencias y nosotros lo planteamos por su condición sexual y el trabajo que hacía”, explicó Mónica Barroso, abogada de la madre de la víctima.

   La explicación es oportuna porque no sería descabellado suponer que, siendo el herido un travesti agredido en la calle durante la madrugada, podrían haberse filtrado prejuicios en la atención médica. Máxime cuando en el fallo queda acreditado, además, que el profesional hizo hincapié en un presunto estado de ebriedad de la víctima.

   Sin embargo, la sentencia hizo eje, “de forma contundente, en que el médico debería haber hecho más de lo que hizo, ya que desde que llegó la policía y llamó al Sies existió la presunción de una herida de arma blanca”, afirma Barroso.

   Lo que nunca quedó claro fue quién aplicó el puntazo al travesti y, por ende, lo asesinó. “Esto viene de un proceso penal de instrucción que no logró identificar quién fue el autor de la agresión”, contó Barroso. Así, en materia de responsabilidad penal, el crimen quedó impune.