Las naciones ricas deberán asumir culpas y costos

El mundo desarrollado debe asumir la mayor parte de la responsabilidad y de los costos de la lucha por frenar el proceso de cambios climáticos, pese a que los países en desarrollo de mayor ingreso no pueden eximirse de la tarea de reducir sus emisiones, consideraron ayer los especialistas.

“Muchos países de ingreso mediano se convierten en emisores significativos de gases de efecto invernadero en términos agregados, pero no tienen la deuda de carbono con el mundo que han acumulado los países desarrollados y, en términos per cápita, aún siguen siendo emisores pequeños”, afirmaron en la cumbre de Brasil.

Señalaron que los efectos del cambio climático pueden causar retrocesos en el desarrollo de América latina, “debido a los elevados niveles de pobreza de la región y a la falta de capacidades para manejar los riesgos derivados del clima”.

“Serán los pobres quienes sufrirán las peores consecuencias y quienes tendrán que enfrentar esta crisis con los escasos recursos que poseen. En la región se esperan pérdidas en agricultura, lo que tendrá efectos negativos en la lucha contra la pobreza”, indicaron.

Según el informe, “los pobres del mundo y las futuras generaciones no pueden permitirse la complacencia y las evasivas que todavía caracterizan a las negociaciones internacionales sobre cambio climático”.