El lavagnismo discute cómo será su relación con Carrió

El acercamiento o no con la líder de la Coalición Cívica abrió dos frentes entre los aliados del ex ministro

El lavagnismo (espacio integrado por radicales y peronistas disidentes que apoyaron a Roberto Lavagna en los pasados comicios) se encuentra en estado deliberativo, lo que dejó al descubierto las diferencias internas.

Por un lado, discute sobre la relación que mantendrá a futuro con la Coalición Cívica (CC) que lidera Elisa Carrió. Por otro, la vertiente peronista —cuya única representación en el Congreso quedó en manos del diputado Jorge Sarghini— se encuentra más pendiente de lo que pasa en el PJ, al punto que ayer le pidió “reglas claras” al kirchnerismo para iniciar un proceso de normalización partidario.

El sector más cercano a Lavagna salió a distanciarse de la estructura de Carrió, quien insiste en que la CC se afirmará como primera minoría en el Congreso. Le advirtieron a la fundadora del ARI que “lo que mantiene a las fuerzas políticas no es una banca más o menos” sino la “coherencia” de sus programas, de lo que carece el proyecto que lidera la chaqueña, según opinó Alejandro Rodríguez, vocero político de Lavagna.

Por su parte, el senador radical y ex compañero de fórmula de Lavagna, Gerardo Morales, adoptó una postura conciliatoria respecto a Carrió al anunciar que hablará “con la CC para coordinar acciones legislativas”. Tampoco descartó acercarse a Lilita para hacer frente al poderío kirchnerista en ambas Cámaras.

Sarghini coincidió con Morales al considerar que “lo fundamental es ir encontrando posibilidades de acuerdo sobre cuestiones concretas”, y resaltó que antes de establecer cuál será la relación con Carrió es necesario hacer un debate interno en la concertación lavagnista.

En medio de los reacomodamientos legislativos tras los comicios del pasado domingo, el vocero Rodríguez criticó el “programa flexible entre comillas de la CC”, que “en los últimos meses pasó de la distribución del ingreso al enfriamiento de la economía, dos posiciones dicotómicas, casi extremadamente opuestas”.

Por la normalización. Aunque aclaró que “todavía nadie habla del tema”, Sarghini recordó que su sector “siempre” impulsó la normalización del PJ, y para ello no descartó reunirse con otras vertientes antikirchneristas, como el duhaldismo. “Vamos a hablar con todos”, despejó.

Tras coincidir con otros dirigentes lavagnistas en la necesidad de normalizar el PJ, Sarghini le pidió al kirchnerismo que la interna “se resuelva democráticamente y con reglas de juego claras”.