Un policía bonaerense comete un brutal asesinato

Un policía bonaerense mató de un disparo en la nuca a un muchacho de 18 años cuando intervino en una pelea que protagonizaban su hijo y un tercer muchacho en la localidad bonaerense de Hurlingham. El efectivo de seguridad se entregó poco después y dijo que el disparo fue accidental.

Todo ocurrió el jueves a las 20.30 en el oeste del conurbano bonaerense cuando el hijo del sargento Carlos Madrid mantenía una pelea a golpes de puño con otro joven.

El efectivo policial, de 44 años y perteneciente a la división Traslado de Detenidos, observaba la reyerta junto con otros testigos. Pero cuando vio que su hijo comenzaba a ser vencido, intervino en el asunto sacando el arma reglamentaria y amenazando a los presentes para que se retiraran.

“¿Por qué sacas el arma si es un mano a mano?”, preguntó Daniel Ezequiel Céspedes, quien recibió un disparo en la nuca como respuesta.

El sargento se entregó de inmediato en la comisaría de la Mujer de Hurlingham, ubicada a pocas cuadras del lugar, y también dejó su arma reglamentaria con la que ejecutó al muchacho.

Según indicaron fuentes del Ministerio de Seguridad, el policía fue separado de la fuerza luego de que el caso fuera analizado por la Auditoría General de Asuntos Internos de la fuerza de seguridad.

El caso está siendo investigado por el fiscal de Morón, Fernando Bellido, quien ayer indagó al policía detenido, que quedó imputado del delito de homicidio simple.

Fuentes judiciales indicaron que el sargento admitió su participación en el hecho pero se defendió argumentando que el disparo fue accidental.