Pagaban 2.400 euros por cada chico

Parejas francesas denunciaron a la organización que pretendió sacar de Africa a 103 niños

Las parejas francesas que aspiraban a adoptar a alguno de los 103 niños que intentó trasladar la ONG francesa Arca de Zoé hace una semana desde Chad a Francia, alegando que eran huérfanos de Darfur, demandaron a la organización por estafa ante los tribunales de París.

“Nos mintieron y nos manipularon”, afirmó ayer una pareja de padres adoptivos frustrados en una entrevista que publicó el diario L’Independent y en la que aseguraron que habían entregado 2.400 euros por la “operación” .

También revelaron que Arca de Zoé los obligó a mantener en estricto secreto todas las negociaciones y a comunicarse en códigos.

Uno de los mensajes que recibieron anunciando la llegada de los niños africanos decía: “Las primeras gacelas han llegado”.

Una ex colaboradora de la ONG admitió entre tanto que Arca de Zoé no comprobó que los niños fueran huérfanos.

“Confiamos en los líderes de los pueblos, que a veces nos traían 15 niños. ¿Cómo podíamos saber si todos eran huérfanos?”, dijo la mujer.

Para ubicar a los niños, Arca de Zoé contrató a intermediarios que no cobraron honorarios pero sí recibieron dietas, agregó.

Le Parisien publicó también una carta de Eric Breteau, líder y fundador de Arca de Zoé, en la que explicó que el objetivo de la misión era encontrar refugio seguro para los niños, pero de ninguna manera su adopción definitiva.

El gobierno francés negó por su parte haber hecho esfuerzos insuficientes para evitar la operación frustrada a último minuto por la policía de Chad.

“Alarmamos oportunamente a las autoridades chadianas”, dijo el portavoz gubernamental David Martinon. “Chad es un país soberano”.

Quedarían libres. El presidente de Chad, Idriss Deby, aseguró en varios llamados telefónicos al presidente Nicolas Sarkozy su esperanza de que los periodistas franceses y los asistentes de vuelo españoles “recuperen pronto la libertad”.

Los 103 niños africanos permanecen bajo la custodia de las autoridades de Abéché mientras continúan las investigaciones para determinar su verdadero origen, informó ayer Unicef.

Los trabajadores humanitarios, con los del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur) y los del Comité de la Cruz Roja Internacional, concluyeron que al menos 91 de los 103 niños—21 niñas y 82 varones de entre uno y diez años— no son huérfanos.

Breteau y otros cinco miembros de la ONG fueron detenidos en Abéché, al este del Chad, junto a tres periodistas franceses y los siete tripulantes españoles del avión que debía trasladar a los 103 niños a Francia.

También fue arrestado en Yamena el piloto belga que en un avión había transportado a los niños.

Ayer, nueve franceses fueron conducidos a esa ciudad capital.

Poco después arribaron los españoles, a los que se acusa de complicidad en los delitos de secuestro y estafa que pesa zobre Arca de Zoe.(DPA y AP)