Quieren quedar solos

Los Pumas están ante una situación en la que dependen de ellos mismos. Y si bien el partido de hoy ante Namibia parece accesible, es clave para el futuro de los dirigidos por Loffreda y Baetti. Por un lado deberán conseguir el punto bonus, y por otro evitar más lesiones, que fueron el principal tema de los últimos días en el campamento argentino.

   El partido ante los namibios, que se disputará en el estadio Velodrome de Marsella, comenzará a las 16 (hora argentina), será dirigido por Stuart Dikinson y televisado en directo por Espn+.

   Para este partido, a priori el más sencillo del grupo, el entrenador Marcelo Loffreda dispuso un equipo bastante remendado, en parte por los jugadores que se encuentran lesionados y en parte porque otros no están en óptimas condiciones y no vale la pena arriesgarlos ocho días antes del encuentro decisivo frente a Irlanda.

   El encuentro promete ser áspero pero posiblemente no tan duro físicamente como lo fue contra Georgia. Los africanos, en su mayoría, son amateurs, pero tienen mucha influencia del rugby sudafricano. El mejor ritmo de competencia que pueden encontrar es en la vecina Currie Cup, pero muy pocos de sus jugadores tienen ese roce. Además, la desmoralizante derrota por 87-10 ante los galos es un bocado difícil de digerir para cualquier equipo, incluso si estaba preparado para perder. Husselman decidió realizar cambios al por mayor, tratando de preservar a varios jugadores con vistas al partido final con Georgia.

   El seleccionado argentino enfrentará este tercer compromiso obligado a introducir varios cambios. Uno de ellos tendrá que ver con el puesto de apertura. Juan Martín Hernández está en plena recuperación de un golpe y Federico Todeschini estuvo en duda hasta último momento, por lo que fue relegado al banco de suplentes.

   Sin embargo, para Loffreda no hay mal que por bien no venga. “Felipe es un jugador muy agresivo que juega muy cerca de la línea de ventaja y eso a nosotros nos viene bárbaro. Va a jugar (para Namibia) un apertura que habitualmente juega de fullback que no está habituado a jugar de apertura. Es un jugador que no tiene agresividad en lo que tiene que ver con el juego sin pelota”, analizó el entrenador.

   Los Pumas, al igual que contra Georgia, van de banca. Por eso será una buena medida para examinar el verdadero potencial de gestación ofensiva del equipo argentino cuando tiene la responsabilidad de ser protagonista y no puede atacar tanto de pelotas recuperadas. l