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sábado,
08 de
septiembre de
2007 |
EEUU sufre la crisis financiera y arrastró a las Bolsas del mundo
En Argentina, el BCRA colocó pases por $ 1.257 millones para asegurar la liquidez del sistema
Wall Street volvió a sacudir a los mercados del mundo. La culpa fue esta vez del informe sobre la evolución del empleo en Estados Unidos, que informó sobre una caída de los puestos de trabajo en ese país. La sensación de los inversores fue que la crisis hipotecaria norteamericana comenzó a impactar en la economía real. La consecuencia fue que cayeron las principales Bolsas del mundo y, con ellas, el índice Merval de acciones porteñas, que se desbarrancó 1,82%.
En agosto último las empresas estadounidenses eliminaron a 4.000 puestos de trabajo, en comparación con el aumento de 68.000 en julio que se había dado en julio. El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Henry Paulson, dijo que la cifra “no es del todo sorprendente” y confió que la economía norteamericana terminará el segundo semestre del año en expansión.
Pero los inversores le creyeron más al ex presidente de la Reserva Federal de ese país Alan Greenspan, quien advirtió que lo ocurrido durante las últimas siete semanas en los mercados “es idéntico a lo ocurrido en el año 98 y en 1987”, cuando los derrumbes bursátiles impactaron en la economía real.
Por si los datos oficiales sobre desempleo no fueron suficiente, Countrywide Financial Corp, el mayor prestamista hipotecario de Estados Unidos, planea recortar entre 10.000 y 12.000 empleos para ajustarse a una menor demanda en el mercado de vivienda, el aumento de los incumplimientos y un contexto general de mercados de crédito más ajustados.
En Argentina, el cimbronazo mundial se sintió con una caída de la Bolsa del 1,82% y una fuerte depreciación de los bonos. El Discount en pesos, el bono más representativo del canje de deuda, cerró con un retroceso del 1,53%.
Liquidez. Pero también hay mayor demanda de liquidez de parte de bancos, empresas y particulares, así como en una sostenida compra de dólares. Para enfrentar esta presión, el Banco Central siguió cumpliendo con su estrategia de intervención. Ayer inyectó ayer 83,4 millones de pesos, a través de subastas de pases activos a 3 y 7 días. Desde la semana pasada a la fecha, la entidad financiera colocó en el mercado 1.257,4 millones de pesos mediante una operatoria que consiste en dar préstamos a las entidades que requieran cubrir necesidades transitorias de liquidez mientras que a cambio los bancos ofrecen en garantía Lebac, Nobac y títulos públicos.
La autoridad monetaria también interviene en el mercado de futuros del dólar, para evitar presiones alcistas. Sin prisa pero sin pausa, la demanda de dólares llega de empresas y particulares. En la plaza local, Ariel Mercurio, de Transatlántica, dijo que la demanda es “altísima y sostenida, muy notoria si se la compara con la de semanas anteriores”.
Algunos particulares se quejaron ayer porque en algunos bancos se limitaba la venta de la divisa. Héctor Williner, gerente del Banco Nación, dijo que no es cierto que la entidad “venda hasta una cierta cantidad o que haya topes” pero aclaró que se prioriza a los clientes antes que a los “compradores golondrinas”. En la calle, el tema está convulsionado. Los “arbolitos” de la peatonal confirmaron que la gente que no puede comprar en el banco recurre a ellos con asiduidad.
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Fotos
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La Bolsa porteña bajó 1,82%, arrastrada por las pérdidas de Wall Street.
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