Torcido

Una vez más Ronald Raldes demostró que no está pasando por un buen momento deportivo. Al igual que ante Gimnasia, anoche cometió un grueso error en defensa que derivó en el triunfo anfitrión. El boliviano se mostró muy amargado a la salida del vestuario por su nuevo yerro. De hecho, ascendió al micro sin formular declaraciones y con el rostro invadido por la bronca. Quedó claro que cuando el defensor se equivoca, Central lo paga muy caro, como también pasó ante San Lorenzo en el Clausura pasado.