Viajeros del Tiempo

Guillermo Zinni / La Capital

El descanso eterno de Francisco Semino. Honda impresión causó en nuestros círculos sociales y comerciales la noticia del fallecimiento del conocido comerciante señor Francisco Semino, quien formó parte de esa falange de hombres que con su esfuerzo hicieron la base del desarrollo comercial de nuestra ciudad y al que le sobreviven sus hijos Marcelino, Angel, María, Eduardo, Juan, Virginia y Francisco, y cuyos restos serán sepultados hoy en el cementerio San Salvador. El escenario del trágico suceso fue el establecimiento de fideería ubicado en calle San Martín 2175, donde su propietario, don Fancisco Semino, italiano, de 65 años de edad, puso fin a su vida, lo que produjo una conmoción en el barrio entero. El primero que tuvo conocimiento del desgraciado fin del señor Semino fue un hijo de éste llamado Marcelino, quein poco antes de las seis de la mañana abandonó el lecho y al dirigirse al fondo de la casa, colgado con una soga de los tirantes del galpón, vio el cuerpo de su padre que se balanceaba en el espacio, ya cadáver. A las voces del joven acudió la demás familia delextinto y varios peones, produciéndose el cuadro de desesperación que es de imaginar. Con ayuda de la policía se procedió luego a descolgar el cadáver, el que luego fue entregado a su familia para la inhumación. Las causas del suicidio no se conocen a ciencia cierta por cuanto Semino no dejó ninguna nota escrita, pero sus deudos dicen que aquél padecía de una enfermedad crónica que hacíalo sufrir mucho y que ya otras veces había atentado contra su vida. En esta ocasión, pues, encontró la muerte, y para llevar a cabo su propósito se colgó de una cuerda que previamente ató en la rueda de un carro pasándola antes por un tirante del techo del galpón. Al señor Semino se lo consideraba como un hombre de sólida fortuna, por lo que se estima que no fue por cuestiones de negocios que buscó el descanso eterno.

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