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sábado,
11 de
agosto de
2007 |
Hasta ahora, River-Newell’s se disputará
El juez de la causa por el crimen del barra podría suspenderlo
Hasta el momento, River Plate-Newell’s se jugará como estaba previsto, mañana en el Monumental a las 14.10. Pero ayer el partido estuvo a punto de suspenderse y al cierre de esta edición no quedó claro si existe hoy la posibilidad de que esa determinación sea tomada. La decisión está sólo en manos del juez que lleva adelante la causa por el asesinato del barrabrava millonario Gonzalo Acro, quien fue velado ayer en medio de un escándalo en el que fueron agredidos periodistas por el grupo de violentos al que pertenecía la víctima.
Las amenazas entre las facciones de la barrabrava riverplatense llevaron al juez en lo Criminal de Instrucción número 11, Luis Rodríguez, quien investiga el reciente asesinato de Acro, a consultar al Ministerio de Interior acerca de la conveniencia de la realización de River-Newell’s, pero durante la noche le contestaron que ya tenían preparado el operativo policial y que tomara él la decisión final.
Hasta anoche al menos, el juez no tomó una decisión pero eso no quiere decir que no pueda suspender hoy el partido. La AFA no opinó (aunque ofreció pagar 300 efectivos) pero quiere jugarlo y para eso recibió el respaldo nada menos que del Ministerio que conduce Aníbal Fernández, quien a través de una misiva aseguró que los recaudos fueron convenientemente tomados.
La convulsionada jornada de ayer arrojó además que los hermanos Alan y William Schlenker quedasen imputados por el crimen de Acro (ver aparte), cuyo cuerpo fue enterrado en la Chacarita tras un tumultuoso velatorio en Villa Urquiza, durante el cual integrantes de la fracción rival, liderada por Adrián Rousseau, agredieron a periodistas.
Los que más sufrieron fueron los camarógrafos (ver “La ligó“) ya que los barras arrojaron proyectiles. Incluso se vio volar el pesado trípode de una cámara. También hubo empujones a la prensa.
La violencia, manifestada e intuida, llevó al juez Rodríguez a pensar en la suspensión del partido, más teniendo en cuenta que la relación de la barra de River con la de Newell’s también es de temer. Pero al menos hasta anoche no puso trabas a que el partido se juegue y en todo caso puede pensar también en rezar.
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