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 domingo, 24 de junio de 2007  
La vigencia de la idea de Pichón Riviere

Mañana se cumplirán 100 años del nacimiento del psiquiatra Enrique Pichón Riviere, fundador de la primera escuela de psicología social, quien enfocó su estudio en la intrincada relación entre el paciente y su grupo familiar y en la idea de que las personas no pueden ser analizadas fuera de las condiciones sociales en que viven.

   “La conmemoración del nacimiento de Pichón, el 25 de junio de 1907, es significativa por la vigencia actual del pensamiento de quien fue un precursor en el terreno de la salud mental en la Argentina, que hasta entonces era un gran desierto”, dijo Ana Quiroga, directora de la escuela fundada por el influyente psiquiatra.

   Pichón Riviere fue uno de los fundadores de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA) y promotor del psicoanálisis en el país y en Latinoamérica, y desarrolló la psicología social como teoría de la compleja relación que se da entre un momento histórico y la constitución y desarrollo de cada persona.

   Esta inquietud por la relación entre el sujeto y su contexto, clave en el desarrollo de su pensamiento, logró desplegarse en toda su dimensión a través de su labor como jefe de admisión en el Hospital Psiquiátrico porteño.

   “En la década del 40, había una concepción de que la familia era la víctima de un victimario que era el que la enfermaba, cuando en realidad es un proceso de victimización recíproca”, sostuvo la especialista.

   Para Pichón, las complejas relaciones que se establecen entre una persona y su grupo familiar generan padecimientos que afloran de manera diferente en los integrantes de ese grupo.

   Es alguno de ellos, por sus características particulares, el que evidencia la “incapacidad de soportar un determinado monto de sufrimiento”, tal como Pichón definió la locura.

   El psiquiatra se definía a sí mismo como un “hombre de contrastes” porque había nacido en Ginebra, en el seno de una familia de la alta burguesía textil de Lyon que, como muchos europeos de ideas avanzadas, se lanzó a una aventura en América.

   La familia de Pichón llegó en la década del 20 al Chaco porque el gobierno adjudicaba tierras para sembrar algodón. En esa zona se cruzaban fuertemente la cultura originaria toba y guaraní con la criolla y la propia, exportada por su familia europea.

   Del Chaco salieron muy pronto porque fracasó la plantación de algodón y entonces el padre devolvió las tierras y la familia se trasladó a Goya.

   Pichón se trasladó más tarde a Buenos Aires para estudiar medicina y tuvo otra experiencia que lo marcó.

   Ingresó a trabajar en el diario Crítica, dirigido por Natalio Botana, y conoció a un grupo importante de intelectuales como los hermanos Raúl y Enrique González Tuñón y Conrado Nalé Roxlo, y se también se hizo amigo de Roberto Arlt, lo que implicó una apertura muy grande para él.
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