Veinte años a pura máquina

"Sentir / que es un soplo la vida / que veinte años no es nada, / que febril la mirada / errante en la sombra / te busca y te nombra". Desde la letra de "Volver", Carlos Gardel canta que veinte años no es nada pero en la vida de una empresa 20 años son muchos, sobre todo si ese lapso ha sido prolífico, rico en realizaciones y en hecho trascendentes. La empresa productora de válvulas de competición y alta performance Motor Parts cumplió dos décadas festejando que durante 2006 exportó el 90% de su producción.

Es que la industria autopartista en general, desde hace un par de años, tiene una buena performance. Se estima que el sector a nivel nacional cerró 2006 con una facturación superior a los 13 mil millones de pesos, con exportaciones por 2.000 millones de dólares, más de 500 empresas en funcionamiento y dando empleo a más de 52 mil personas. Las proyecciones es que continuará el 2007 con un crecimiento de dos dígitos.


Just in time
Motors Parts se creó el 29 de noviembre de 1986 y bien podría decirse que fue un fruto de la necesidad. En las pymes argentinas eran pocos los que hablaban del "just in time", pero en el grupo Basso esta filosofía ya había impuesto la obligación de ajustar al máximo los sistemas de producción y la elaboración de las válvulas de competición y alta performance, esas que necesitan una dedicación más exclusiva que los productos de serie, requería una especialización.

Juan F. B. Basso y sus hijos, José Luis y Juan Carlos, interpretaron que la manera de atender esa demanda y no alterar los procesos productivos de la fábrica madre era a través de la creación de otra empresa. Aquellos visionarios buscaron una localidad cercana a Rafaela y encontraron en Lehmann, a 11 kilómetros al norte de esa ciudad, el entusiasmo de un presidente comunal y la bienvenida de una comunidad trabajadora, formada en los mismos valores con los que el grupo Basso trabajó desde su fundación.


Mercado interno y externo
Así nació Motor Parts, con el objeto de producir pequeñas series de válvulas especiales para abastecer tanto el mercado interno como externo, con un sistema productivo especialmente preparado para trabajar sobre pequeñas partidas. Y aunque Alfredo Lepera haya escrito aquel tango en el que "20 años no es nada", en Motors Parts en 20 años se pudo hacer mucho.