|
miércoles,
13 de
diciembre de
2006 |
El simulacro y el marketing político
Cuando Hermes Binner abra el libro que compró por 15 pesos se encontrará con páginas repletas de citas de los propios socialistas o de otras referencias que acusan al partido de la rosa de vinculaciones con regímenes militares o tener profundo desprecio por los movimientos populares, como el radicalismo y el peronismo. Pero en la página 111 divisará un subtítulo con letras bold bien destacado que reza: "Hermes Juan Binner: el gran Tartufo". La referencia es de un libro de Moliere, donde el personaje central "es un individuo hipócrita y ambicioso, que se disfrazaba de honradez y virtud para quitarle sus bienes a una familia burguesa de la época". Los autores de "La secta socialista" se encargan de parangonar a Tartufo con Binner, y concluyen: "Binner, en lo táctico, ha elaborado un plan que simula sus vicios de origen, se dice popular, defensor de los derechos humanos, critica al gobierno por su nepotismo, le molestan los acuerdos de cúpulas...". Pero, para Lagna y Battistoni, es solamente eso, un "simulacro, apuntalado por una formidable maquinaria publicitaria sostenida económicamente por la Municipalidad de Rosario".
enviar nota por e-mail
|
|
|