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 domingo, 10 de diciembre de 2006  
A 15 días del crimen en Río Cuarto
Cambio de hábitos en el country donde mataron a Nora Dalmasso
Sus amigas no van a la pileta, pocos juegan al golf y el silencio invadió el lugar

Río Cuarto.- Los habitantes del exclusivo barrio Villa Golf, en una de cuyas casas fue estrangulada hace dos semanas Nora Dalmasso, parecen haber cambiado sus actividades sociales a raíz del crimen y prefieren no hablar del caso. En tanto, los fiscales de la causa decidieron dedicar el fin de semana a estudiar la gran cantidad de información que reunieron en el expediente y retomar el lunes la ronda de testimonios para ir cerrando hipótesis.

En el club house del country, donde se encuentran los amantes del golf y quienes practican otros deportes, los empleados recibieron la estricta directiva de no hacer declaraciones. Sin embargo, una fuente allegada al club contó al enviado de Télam que amigas de Dalmasso que iban todos los días a la pileta, inaugurada hace pocas semanas, no volvieron a concurrir desde que se conoció el crimen.

En el barrio también comenzó ayer un torneo de golf, pero que reunió a mucha menos gente que la habitual por lo que no se sabe si se jugará el tradicional torneo Clausura, en el que se encuentran todos los golfistas para cerrar el año.

A un grupo exclusivo para hombres denominado "la Peña del 36", entre cuyos miembros está Marcelo Macarrón, viudo de Dalmasso, y que se reunía todos los jueves por la noche "sin horario", no se lo vio la semana pasada por el salón de la sede social del club. Además de Macarrón, también participaba de esas reuniones Guillermo Albarracín, quien admitió haber sido amante de Nora Dalmasso, Daniel Lacase, abogado del viudo y muchos de los maridos de las mujeres conocidas como las "Congresistas", amigas de la víctima que compartieron con ella la última cena.

Tanto las fiestas de la Peña como las que se hacían dentro del barrio y el country San Esteban eran privadas y el servicio de catering se retiraba a las 2, pero el encuentro continuaba. "Eran fiestas privadas en serio", explicó a Télam uno de los empleados de ese servicio. Y recordó que "tanto Macarrón como Nora eran gente de bien. El era un señor, de los que acá no abundan, y ella era muy amable y divertida".

Así, mientras dentro del country el asesinato de Dalmasso parece haber cambiado las actividades de todos, afuera del barrio la causa por el crimen sigue su curso. "La investigación venía muy intensa y queríamos tomarnos un tiempo para analizar el expediente", explicó el fiscal Javier Di Santo, quien está a cargo de la causa junto a su par Fernando Moine.

El instructor judicial dijo que con "toda la evidencia reunida hasta la fecha" buscarán sacar conclusiones para evaluar qué pasos seguirán para inclinarse por alguna de las hipótesis que manejan. Actualmente las líneas de investigación son tres: homicidio pasional por parte de algún amante "despechado", crimen por encargo y violación seguida de muerte.

Debido al impasse impuesto por los fiscales, las declaraciones de testigos que estaban previstas que continuaran ayer seguirán el lunes, por lo que en al fiscalía se dedicaron exclusivamente a "releer cada punto del expediente y estudiar los distintos hilos conductores que se elaboraron y luego se fueron descartando".

Según el fiscal, se trabaja "con nombres, evaluando dónde estaban al momento del crimen y mediante testigos, y si alguien vio a alguno de los nombrados" cerca de la casa de la familia del traumatólogo Marcelo Macarrón durante la madrugada del 25 de noviembre pasado.

No obstante, la pesquisa "sigue siendo general pues no se descartan hipótesis", aunque se espera que nuevos "hilos conductores", que se inclinan por distintos nombres y personas investigadas, surjan a lo largo de los próximos días.

Según el expediente, al que tuvo acceso Télam, se avanzó en la reconstrucción de la última noche con vida de Norita, que comenzó en un resto-bar y terminó en la casa de una de sus amigas, Rosario Marques. En el documento se indica que el encuentro en esa casa "fue una mera eventualidad", pues "las dos mujeres (Marques y Dalmasso) no son íntimas amigas".

"Según argumentó la testigo, se retiraron del bar porque no podían fumar y para cuidar a su nene, porque la niñera que había dejado a su cargo se debía retirar", informó una fuente.

Dalmasso fue hallada asesinada la tarde del domingo último en el dormitorio de su hija, dentro de la coqueta vivienda del country Villa Golf. Estaba desnuda y tenía atado al cuello el lazo de su bata con un doble nudo. Nora estaba sola en el domicilio familiar por ausencia de sus dos hijos y su esposo, quien había viajado a la ciudad uruguaya de Punta del Este para participar de un torneo de golf.

El asesino dejó marcas de sus dedos en el cuello de la mujer, a quien asfixió por compresión manual además de haberla estrangulado con el lazo. En razón de ello, las autoridades judiciales descartaron la posibilidad de un juego sexual que terminó en accidente y afirmaron que la muerte se debió a un homicidio. (Télam)
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Ingreso al country donde vivía Dalmasso.

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