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domingo,
10 de
diciembre de
2006 |
Cómo expandir
la frontera
inmobiliaria
Arquitectos, ingenieros y agrimensores rosarinos coincidieron en la necesidad de facilitar la radicación de nuevos desarrollos inmobiliarios en áreas alejadas de la zona céntrica de la ciudad para permitir que los pequeños y medianos inversores locales continuen participando del crecimiento del sector de la construcción que vive Rosario. Es que los profesionales advierten que los grandes proyectos como Puerto Norte o la Yerbatera Martin, que llegan de la mano de inversores premium, son importantes para Rosario pero insisten en que también se deben afianzar los horizontes de los hombres locales.
En el seminario "Perspectivas 2007 del mercado inmobiliario de Rosario y la región", que se realizó en la Fundación Libertad, el presidente del Colegio de Arquitectos de Rosario, Aurelio José Saruá, indicó que como "el área central está saturada de edificios hay que ampliarse a otras zonas como Alberdi o calle San Martín". En ese sentido, remarcó que "es necesario cambiar algunos índices y normativas para que los proyectos sean viables".
Saruá consideró que es en estas otras áreas donde el inversor local tiene la oportunidad de hacer negocios.
La titular de la Secretaría de Planeamiento de la Municipalidad, Mirta Levin, le dio el visto bueno a la propuesta al considerar que el área céntrica de la ciudad "es un engendro muy particular" que tiene edificios de altura entre viviendas bajas. Hay que investigar y estar dispuestos al cambio, no podemos continuar con un modelo que no dio resultados en la ciudad", enfatizó.
Falta de infraestructura
El economista de la Fundación Libertad, Salvador Di Stefano, dijo que por el alto valor de las propiedades, debido al aumento del precio de los cereales que motorizó la demanda, "una alternativa interesante es encarar la construcción en terrenos no tan céntricos".
Junto a la propuesta de ampliación a otras áreas de la ciudad surgió la necesidad de obras de infraestructura que acompañen el crecimiento de determinadas zonas. Alejandro Laraia, presidente del Colegio de Profesionales de la Ingeniería Civil de Santa Fe, llamó a que la ciudad esté planificada tanto desde el punto de vista arquitectónico como desde la rama de la ingeniería y sugirió que "se tenga en cuenta la infraestructura necesaria para el desarrollo de los posibles lugares de ampliación".
Como respuesta la secretaria de Planeamiento de la Municipalidad precisó que "las empresas prestatarias se tienen que poner a tono con el crecimiento de la ciudad y no al reves".
Otro punto central tuvo que ver con la normativa sobre la obligatoriedad de que los departamentos de más de 40 m2 deberán tener cocheras. Los arquitectos e ingenieros plantearon que los metros cubiertos estipulados perjudicarán la calidad de vida de los habitantes de la ciudad que se radiquen en el centro rosarino porque "las nuevas construcciones serán de departamentos de 39,9 m2 para no tener que hacer cocheras".
Levin salió al cruce de los comentarios y aseguró que hubiese preferido un minucioso análisis de la problemática pero dijo que el Concejo se adelantó y sacó la normativa, que el martes fue firmada su reglamentación y girada para su aprobación.
P.M.
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