Brasil culpa a dos pilotos por la tragedia de Gol

La Policía Federal de Brasil acusó ayer a dos pilotos estadounidenses de causar el accidente que hizo estrellarse en la Amazonia al avión de la aerolínea Gol con 154 pasajeros a bordo.

Los pilotos, Joseph Lepore y Jean Paladino, comandaban un jet ejecutivo que chocó una de sus alas con la de un Boeing 737-800 operado por la Gol el 29 de septiembre, cuando ambas naves volaban en sentido contrario entre las ciudades de Brasilia y Manaus. Los acusados pueden recibir una pena de hasta cuatro años de prisión si son condenados.

El abogado de los pilotos, José Carlos Dias, afirmó que la decisión respondía a un prejuicio. "(La acusación) fue un acto absolutamente de prejuicio discriminatorio, hasta con carácter político. Quieren encontrar un culpable" del accidente, dijo.

El abogado confirmó que los dos pilotos se aprestaban ayer a viajar a Estados Unidos en un vuelo contratado, tratando de escapar a los atrasos que se están registrando en los aeropuertos brasileños.

Lepore, de 42 años, y Paladino, de 34, permanecieron forzosamente en Brasil luego del peor desastre aéreo en la historia del país debido a que un juez ordenó que se les retuvieran sus pasaportes mientras se investigaba el accidente.

Un tribunal federal decidió sin embargo el martes pasado que se le devolvieran los documentos en un plazo de 72 horas, luego de que prestaran declaración ante la policía.

El miembro del tribunal a cargo de informar sobre el caso dijo en su voto que "la medida de restricción de la libertad de movimiento de los extranjeros no tiene respaldo legal en la ley procesal penal" del país.

La decisión respondió a un pedido de habeas corpus presentado por los abogados de los pilotos.

El accidente ocurrió cuando el jet Legacy, recién entregado por la fabricante brasileña Embraer a la empresa estadounidense ExcelAir, chocó con el Boeing de Gol mientras las naves volaban en sentido contrario a 37.000 pies (11.280 metros) de altura.

El Legacy efectuó un aterrizaje de emergencia pese a la rotura de la punta de una de sus alas, pero el avión de pasajeros se desplomó, lo que causó la muerte de sus 154 pasajeros y tripulantes.

El Boeing de Gol se dirigía desde Manaus, capital del estado de Amazonia, hacia Brasilia, mientras el Legacy había partido de San José del Campo y debía hacer una escala en Manaus antes de dirigirse a Estados Unidos.

Los investigadores buscan determinar por qué numerosos llamados radiales entre la torre de control de Brasilia y el Legacy quedaron sin respuesta. (Reuters)