Invitan a sumarse a una campaña a favor de la paz

A poco de celebrarse el Día Internacional de los Derechos Humanos, mañana 10 de diciembre, un manifiesto a favor de la vida, de la paz y la igualdad recorre los países. Se trata de una iniciativa promovida por la Fundación Cultura de Paz, que dirige el ex director de la Unesco, Federico Mayor Zaragoza, y de la que ya se han hecho eco muchas personalidades del mundo como los premios Nóbel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel y Betty Williams (Irlanda); el ex presidente de Portugal, Mario Soares; la presidenta de France Libertés Danielle Mitterrand; los cantautores Luis yute y Silvio Rodríguez; y el teólogo Ernesto Cardenal (Nicaragua), entre otros.

Pero además de invitar a sumarse a este “Manifiesto por la paz y contra la pobreza”, por medio de internet (hay tiempo hasta el 31 de diciembre en la página www.fund-culturadepaz.org) se proponen acciones para acompañar esta campaña, particularmente a difundir y comentar el documento. La escuela y los educadores, aunque en la Argentina las clases han llegado al fin del ciclo lectivo, figuran entre los destinatarios de esta campaña internacional.

El documento que invita a ser leído, analizado y acompañado con la adhesión de los ciudadanos advierte que “cada día mueren 35.000 niños de hambre según la FAO (la organización de la ONU para la agricultura y la alimentación)”. El dato es definido como “un genocidio de proporciones impresionantes”, al que se asiste de manera impasible.

La cifra escalofriante es comparada con aquella que señala que “el gasto diario en armamento es de 2.800 millones de dólares y los subsidios agrícolas de los Estados Unidos y de la Unión Europea rondan los 800 millones diarios”. También que “no hay fondos para el tratamiento del Sida, pero los beneficios del complejo industrial bélico-militar dirigen en buena medida la economía mundial. Es apremiante compartir justamente. No hay mejor caldo de cultivo de la radicalización, la animadversión y la agresividad que la humillación y la exclusión. La violencia no se justifica, pero sus orígenes deben de examinarse atentamente”.

El documento impulsado por el director de la fundación española declara un categórico no a la violencia, a la guerra y a la pobreza y analiza las causas de las decisiones políticas y económicas que someten a las naciones a la indigencia. Luego confía en que si se logran avances progresivos en el sentido de lo que propone el manifiesto, pronto se alcanzará la “mundialización de la conciencia”.

Durante los doce años (1987-1999) en que Federico Mayor Zaragoza estuvo al frente de la Unesco, trabajó para instalar el concepto de “cultura de paz”. Finalmente, la Unesco creó el programa que lleva ese lema y se basa en cuatro ejes centrales: la educación para la paz, los derechos humanos y la democracia; la lucha contra la exclusión y la pobreza; la defensa del pluralismo cultural y el diálogo intercultural, y la prevención de conflictos y consolidación de la paz.