|
jueves,
30 de
noviembre de
2006 |
El Papa sorprende a Turquía con
discursos y gestos conciliadores
El Pontífice recibió elogios de la prensa del país, pero sus argumentos no convencieron a los líderes musulmanes
Efeso, Turquía. - Los medios turcos elogiaron al Papa Benedicto XVI por sus intentos de crear lazos entre cristianos y musulmanes, en su primera visita al país, mientras el Pontífice celebró ayer una misa en la antigua ciudad de Efeso y después viajó a Estambul, para reunirse con el patriarca de la Iglesia ortodoxa griega, Bartolomeo I. Sin embargo, a pesar de sorprender a la prensa con sus gestos conciliadores, el Papa no logró persuadir a líderes religiosos árabes e iraníes sobre sus intenciones de diálogo profundo con respecto a distintas cuestiones del islam.
"Todos los temores y preocupaciones han sido en vano, la visita del Papa ha comenzado muy bien", es la tónica general en la prensa del país. Turquía centró su atención en gestos que el Papa realizó el martes, cuando llegó a su visita de cuatro días: su aparente respaldo a la solicitud de Ankara para sumarse a la Unión Europea (UE) y los elogios al islam después de un polémico discurso que los musulmanes consideraron ofensivo.
"Esta es una gran advertencia para los políticos conservadores que creen que la UE es un club cristiano", escribió Guneri Civaoglu, columnista del periódico Milliyet. La opinión pública, atenta, se percató de que Benedicto no lució abiertamente su cruz colgada del cuello a su llegada del avión a Ankara.
Al celebrar ayer una misa en un templo de Efeso, donde según la tradición católica la Virgen María vivió sus últimos días, el Pontífice hizo hincapié en que la devoción común a la madre de Jesucristo es otro lazo que une a cristianos y musulmanes. Después, a su llegada a una custodiada Estambul, abogó por la reconciliación de Roma con la Iglesia ortodoxa.
Así y todo, líderes musulmanes insistieron ayer en que Benedicto debía disculparse por haber relacionado la violencia con la religión islámica, en un controvertido discurso que dio en la universidad de Ratisbona y que desató la ira de miles de fieles. Allí citó a un emperador bizantino del siglo XIV, que acusaba a Mahoma de haber traído sólo "cosas malas". El Papa dijo que lamentaba que los musulmanes se hubieran ofendido, y que pronunciar la cita no implicaba que estuviera de acuerdo. Sin embargo, no ha pedido disculpas directamente. Aquel discurso llevó a ataques contra iglesias en el mundo musulmán y al asesinato de una monja italiana en Somalia.
Mohamed Habib, uno de los dirigentes de la Hermandad Musulmana egipcia, dijo que la visita del Pontífice a Turquía es un intento de refrenar los pedidos de que se disculpe, y añadió que los musulmanes aún aguardan una explicación. "No ha expresado su opinión con verdadera franqueza y claridad sobre este insulto. Dice que respeta a los musulmanes, pero ¿respeta al islam y sus creencias? Ese es el tema", recalcó.
Representantes del islam político también dijeron que Benedicto no ha cumplido plenamente con las expectativas. "Cuando dice algo bueno sobre el islam sólo está intentando aliviar la tensión. El Papa no se disculpó por su ofensa contra los musulmanes, pero consideramos su discurso como un paso hacia la mejora de la situación", declaró Fauzi Barhum, portavoz del grupo islámico Hamas.
Por su parte, la rama iraquí de la organización Al Qaeda, dijo que la visita del Papa era parte de una cruzada contra el islam apuntada a alejar a Turquía del mundo musulmán. "Es un intento para extinguir la llama del islam entre nuestros hermanos musulmanes en Turquía y para acabar con la herencia islámica, para garantizar que ellos permanezcan en el lodo del secularismo", dijo el grupo Estado Islámico en Irak, liderado por Al Qaeda, en un comunicado publicado en Internet.
enviar nota por e-mail
|
|
Fotos
|
|
El Papa recibió el afecto de un puñado de cristianos durante una misa en Efeso.
|
|
|