BMW lanzó su versión más deportiva: el M6

El nuevo M6 de BMW M GmbH es el coupé más deportivo de la lujosa serie 6. Ello significa que la versión M6 del gran coupé de BMW es representante más potente de todos los tiempos de la serie 6.

Su motor tiene 5.000 cc, diez cilindros, 507 CV (373 kW), su par es de 520 Nm y gira hasta más de 8.000 rpm. Junto con el chasis decididamente deportivo, este propulsor consigue que el nuevo BMW M6 adquiera el rango de un superdeportivo de pura sangre.

Pero mientras que sus competidores suelen tener sólo dos asientos, el M6 ofrece el espacio y el confort de un real 2+2, además de contar con el lujoso equipamiento de un típico BMW del segmento automovilístico más alto.

El BMW M6 coupé comparte su potente motor con el BMW M5. Desde su aparición, este modelo, equipado con el extraordinario motor, es considerado el listón de referencia en el sector de las berlinas deportivas.

Ahora, el BMW M6, equipado con este propulsor de alto rendimiento (con una caja de cambios secuencial SMG de siete marchas), marca las pautas en el sector de los coches deportivos de lujo tipo 2+2. Además, la compañía redujo el peso de la carrocería y, por lo tanto, disminuyeron la masa que debe acelerarse.

El elegante diseño del BMW Serie 6 coupé fue modificado moderadamente y un equipamiento bastante completo.

Aunque el M6 no tiene un antecesor directo, se puede rastrear como antecesores al BMW M635CSi y BMW M1.

El BMW M1 de 1978 fue el primer deportivo que mostró cómo es posible colocar sobre carreteras normales la tecnología proveniente del deporte de competición.

Seis años después le siguió el BMW M635CSi, el primer modelo M que se basó en un modelo de serie de BMW. Por ello es considerado el fundador de la actual familia M, que fue creciendo con el BMW M5 (también lanzado al mercado en 1984) y el BMW M3 (que apareció en 1986).

El BMW M1 fue un deportivo biplaza, con motor central y genes provenientes del deporte de competición automovilística. Fue concebido para la competición y tuvo mucho éxito en las pistas de carreras. Este automóvil marcó el inicio de un largo proceso de desarrollo de coches M.

El BMW M1 tuvo un motor de seis cilindros en línea de 3.500 cc y 277 CV (204 kW), dotado con una culata de cuatro válvulas por cilindro, resultado de la amplia experiencia que BMW ya había acumulado en los circuitos. Este fascinante automóvil era capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 5,6 segundos y alcanzaba una velocidad punta de 262 km/h.

A partir de 1979, el BMW M1 fue utilizado en la serie Procar. Las carreras se disputaban durante los fines de semana de Fórmula 1. Para conseguir la homologación necesaria para las carreras, también se fabricó una versión para la matriculación normal.