Año CXXXIX Nº 49305
La Ciudad
Política
Información Gral
El Mundo
Opinión
La Región
Policiales
Mundo digital



suplementos
Ovación
Turismo
Mujer
Economía
Escenario
Señales


suplementos
ediciones anteriores
Salud 22/11
Página Solidaria 22/11
Turismo 19/11
Mujer 19/11
Economía 19/11
Señales 19/11
Educación 18/11
Estilo 18/11
Chicos pero grandes 11/11
Autos 26/10

contacto

servicios
Institucional

 domingo, 26 de noviembre de 2006  
Está solo y espera

Las versiones digitales o electrónicas de los diarios y el desarrollo de la informática permiten cosas que años atrás eran un poco más complicadas. Por ejemplo: cualquier persona puede hoy escribir una o varias palabras en el buscador de un diario de Internet y aparecerá una larga lista de noticias, notas o reflexiones vinculadas a la palabra en cuestión. Claro que a veces el lector puede tener sorpresas. Si se escribe por ejemplo el nombre de un candidato en la provincia de Santa Fe (del partido que sea) acompañado de las palabras "propuestas" o "plan de gobierno", se advertirá que no aparecerá absolutamente nada de aquello que el lector, ciudadano angustiado por tantos males, desea encontrar.

Más aún, es probable que encuentre algunos dichos, palabras y discursos que en algunos casos son para reír y en otros para llorar. Si se escudriña un poco más en otras ediciones se hallarán incluso palabras que marcan de cuerpo entero al político argentino. No hace mucho alguien -cuyo nombre no viene al caso, por cuanto sus palabras reflejan el pensamiento y sentimiento de una buena parte de la dirigencia de todos los partidos- dijo, ante la ausencia de Reutemann como candidato en el peronismo santafesino, que cada uno tendrá el destino que supo construir y verá como acomoda su cuerpo. Sí, claro que sí, ¿por qué no estimados lectores?; es probable que la figura en cuestión se haya referido a lo que se supo construir haciendo obras y generando proyectos para la comunidad. ¿Acaso cuesta un poco digerir esa lectura? La cuestión es acomodar el cuerpo y la verdad es que algunos son expertos en tales lides y alquimistas políticos sin par: los que ayer eran menemistas de la primera hora hoy son kirchneristas de nacimiento. !Y eso no es nada! Quienes ayer eran la sombra del "corredor" fueron más rápido que un fórmula uno en hacerse incondicionales de la onda "Rafa" que va desde "Rafa-el" Bielsa hasta el hombre de "Rafa-ela". Casi nadie apuesta a Rossi y otros esperan y desesperan.

Pero todo esto es nada si se lo compara con lo que sigue: un hombre muy bien informado, un empresario que tiene cierto don para profetizar acontecimientos políticos, hace apenas horas señaló que la diputada nacional María del Carmen Alarcón habría ratificado un acuerdo político con Hermes Binner. Debe recordarse que Alarcón fue directora de Ceremonial de Carlos Reutemann y de la mano del ex gobernador ascendió a los escalones más altos de la política santafesina hasta convertirse en legisladora nacional. Sin entrar a considerar su nivel intelectual, su capacidad de movilización dentro del peronismo -que según algunos dirigentes parece ser nula (se refiere a su condición para captar y orientar a la militancia)- no es posible olvidar a la diputada, ahora según se ha dicho binnerista, como la persona que se enfrentó al presidente Kirchner y denostó públicamente a su hacedor, al senador Carlos Alberto Reutemann no hace mucho tiempo atrás.

No se trata, naturalmente, de considerar cuestiones como los proyectos aportados a la comunidad por la legisladora (de los que poco se conoce) ni de poner en tela de juicio su personal decisión de sumarse al Frente Progresista, pero a partir de esta transferencia política (que es probable que por diversas razones no se hagan públicas) se pueden efectuar varias reflexiones que dejamos en manos del lector. No sería, además, el único caso de traspaso de peronistas al binnerismo y la pregunta que surge es: ¿ayudan a Binner estas adquisiciones? La sonrisa pícara y las palabras de un pez gordo del peronismo dan esta respuesta: "Pareciera que el Frente Progresista, en su avidez de embarcar tripulantes que lleven a la nave a la victoria, también carga bomba de neutrones". ¿Será efectivamente así?


¿Un peronismo sin trabajadores?
Las 62 Organizaciones peronistas celebraron días pasados el Día de la Militancia en el Club Provincial. Aproximadamente mil militantes se dieron cita. El secretario general de un importante gremio santafesino dijo respecto del mitin que "cada compañero pagó su entrada, aquí no hubo arreo de militantes ni cargas en colectivos o en combis, esto fue algo genuino y espontáneo". Al acto no se invitó a funcionarios de gobierno, pero sí a los tres candidatos peronistas quienes, por una u otra razón, no acudieron al mismo. Estas ausencias, más la indiferencia que algunos candidatos ponen de manifiesto hacia al menos una parte del movimiento obrero, habría rebasado la copa y en una reciente reunión en la ciudad de Buenos Aires, que se realizó con dirigentes nacionales de la CGT y de las 62 Organizaciones, se disparó la idea de construir un movimiento político con miras al 2007 que tenga como sustento la estructura gremial justicialista, pero que esté abierto a todos y que contemple la incorporación de nuevas figuras.

En rigor de verdad, y tal como están las cosas en el gremialismo argentino, estructura no falta, poder económico tampoco y voluntades para el trabajo y la movilización parecen sobrar. ¿Por qué no habría de prosperar un plan que obtendrá más frutos que el de algunos dirigentes políticos a quienes sus familiares han decidido no votar? Lo cierto es que estas reacciones, por lo que parecen lógicas, son la consecuencia de una pléyade de líderes políticos que no sólo se ha olvidado de la gente, sino hasta de algunos dirigentes.


Un clima de convulsiones
En el orden nacional, mientras tanto, hay movimientos ¿imprevistos? que necesariamente repercutirán en las provincias. El propio gobierno nacional parece girar la nave a partir del golpe sufrido en Misiones y otras circunstancias políticas. El apoyo a las medidas judiciales que responsabilizaron a ex funcionarios iraníes en el atentado a la Amia; el pedido de renuncia a D'Elia; la reciente protesta ante Chávez por la intromisión del embajador venezolano en la política interna argentina y otras actitudes hacen pensar que Kirchner intenta cambiar, al menos un poco, el rumbo político. Es más, hay quienes aseguran que en poco tiempo más podría haber una reunión importante del primer mandatario con el cardenal Bergoglio, con la que se intentaría poner fin a las diferencias que han caracterizado al gobierno con la Iglesia Católica.

Varias razones pueden explicar este cambio de actitud y tres de ellas son las siguientes: a pesar de la recaudación fiscal y el crecimiento económico, la situación social argentina no es satisfactoria. No hay inversiones y ninguna sociedad puede vivir eternamente de las bondades de la exportación agropecuaria. Pese a las declamaciones, la desocupación y subocupación persisten y los salarios son paupérrimos. El mismo presidente acaba de reconocer que el 2007 deberá estar signado por una justa distribución de la riqueza. Por otra parte, Misiones demostró que demasiados frentes abiertos no conducen a ninguna victoria. Seguramente en el gobierno se advierte con preocupación el nuevo orden político que se avecina. En ese sentido, ha sido precisamente el misionero Ramón Puerta quien anunció la "decisión de peronistas opositores de constituir un frente electoral para competir con el kirchnerismo en el 2007, en el que incluyó a Mauricio Macri, Roberto Lavagna, Jorge Sobisch, Juan Carlos Blumberg y al radicalismo". En la provincia de Buenos Aires, la aparición de un hombre como Blumberg, que se ha hecho eco de la preocupación de la ciudadanía: el continuo y repudiable auge del delito, es un verdadero espectro que, contando con el apoyo de aquellos aparatos políticos que el propio kirchnerismo denostó, pone en jaque los planes del gobierno. Sin embargo, Puerta parece haber enviado mensajes a Santa Fe haciendo saber que no participaría en ningún movimiento que juegue en contra del peronismo. ¿Por el momento?

En fin, que como siempre, en la argentina todo es incierto. El que hoy triunfa mañana mismo puede ser un derrotado. Nada está claro. Mientras tanto, un hombre que goza de prestigio en todo el país, que moviliza al electorado de centro y de derecha y hasta a algunos progresistas, como aquel personaje de Scalabrini Ortiz, está solo y espera. ¿Santa Fe le queda chica?
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados