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 domingo, 26 de noviembre de 2006  
Policías del Comando oficiaron de parteros en zona sur

Dos policías asistieron sistieron a una mujer que estaba a punto de dar a luz a una niña en la zona sur, quien no pudo acceder a ningún centro asistencial al no tener respuestas del Sies ni de ninguna empresa de taxis.

Alertados por un llamado telefónico efectuado por el marido de la parturienta, una patrulla del Comando Radioeléctrico, integrada por el oficial subayudante Jesús Juan Carlos González y el cabo Oscar Eduardo Trujillo, concurrió esta mañana, alrededor de las 7, al domicilio de Presidente Quintana 193 bis, en la zona sur.

Allí, Gladis Beatriz Orellano, de 32 años, estaba a punto de dar a luz y no había logrado ser trasladada al hospital debido a que no obtuvo respuestas del Sies y de empresa de taxi alguna, segíun detalló su esposo, Celestino Maciel, de 33 años.

Ante la inminencia del nacimiento, los policías pusieron manos a la obra y comenzaron a ayudar a la mujer con el trabajo de parto.

Minutos más tarde, los policías tuvieron entre sus brazos a una niña y cortaron el cordón umbilical con una sevillana previamente desinfectada.

Casi de inmediato concurrió al lugar otro móvil del Comando, en donde el padre y la pequeña fueron trasladados al hospital Roque Sáenz Peña, donde fueron recibidos por la neonatóloga de guardia, quien comprobó que la beba se encontraba en perfectas condiciones, al igual que la madre.

En diálogo con La Capital on line, Celestino -el papá de la beba que pesó 3 kilos 50 gramos y que sería bautizada como Milagros- indicño que "sólo tengo palabras de agradecimiento para estos policías. Yo había estado anoche en el hospital Roque Sáenz Peña y estuvimos a las cuatro porque mi esposa tenái contraciones seguido. Pero me dijeron que me fuera a mi casa y volviera el lunes. Sin embargo, a las dos horas las contracciones eran más seguidas".

"Fue entonces cuando llamé al Sies -agregó el hombre- y me dijeron que no disponían de amulancias en ese momento. Quise conseguir un taxi y fue imposible y solo atiné a llamar a la policía. Por suerte vinieron muy rápido y eran dos policías que sabían del tema. Higienizaron todo cuidadosamente, cortaron el cordón, sacaron la placenta y enseguida vino otro móvil para llevarnos al Roque Sáenz Peña".

Celestino se desempeña como operario en el montaje de cámaras frigoríficas y con el nacimiento de Milagros ya son seis los hijos del matrimonio: cinco mujeres y un varón.
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Milagros junto a su padre y los oficiales que asistieron el parto.



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