Año CXXXIX Nº 49304
La Ciudad
Política
Economía
La Región
Información Gral
El Mundo
Opinión
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Escenario
Educación


suplementos
ediciones anteriores
Salud 22/11
Página Solidaria 22/11
Turismo 19/11
Mujer 19/11
Economía 19/11
Señales 19/11
Educación 18/11
Estilo 18/11
Chicos pero grandes 11/11
Autos 26/10

contacto

servicios
Institucional


 sábado, 25 de noviembre de 2006  
Ucrania pide reconocer como genocidio hambruna que mató a 10 millones

Kiev(Ucrania).- Con velas en sus manos y en un silencio absoluto, miles de ucranianos se congregaron el sábado en una plaza de esta capital para recordar a los 10 millones de compatriotas que murieron durante una hambruna de la era soviética hace 73 años, una tragedia que el presidente quiere sea reconocida como genocidio.

Durante lo peor de la hambruna de los años 1932 y 1933, 25.000 personas morían de hambre todos los días, devastando poblaciones enteras. Los casos de canibalismo se expandieron mientras la desesperación se incrementaba.

“No pido, demando que el parlamento ucraniano reconozca a (la hambruna de) Holodomor como genocidio”, expresó el presidente Viktor Yushchenko ante la multitud reunida en la plaza de Mykhaylivska, en un corto discurso que siguió a un minuto de silencio y al doblar de las campanas.

El dictador soviético José Stalin provocó la hambruna en una campaña para obligar a los campesinos a entregar sus granjas privadas y unirse a las colectivas. Los campesinos de Ucrania se resistieron y padecieron con mayor severidad que ningún otro territorio soviético esa hambruna.

Moscú ha advertido a Kiev que no use el término genocidio, argumentando que el tema no debería ser “politizado”. Algunos legisladores ucranianos han coincidido y propusieron que la hambruna sea denominada como “tragedia”.

Rusia sostiene que la hambruna no apuntó específicamente a los ucranianos sino que también afectó a otros, incluyendo rusos y kazajos. Los historiadores, sin embargo, consideran que la gran mayoría de las víctimas fueron ucranianos, y la hambruna coincidió con los esfuerzos de Stanlin de frenar el creciente nacionalismo ucraniano.

Yushchenko pidió a Rusia que “esté a nuestro lado” y reconozca como genocidio la hambruna masiva. “Con este ejemplo importante, demuestren la empatía humana que es inherente a la población rusa”, sostuvo.

“Sólo podemos llamarle genocidio”, expresó Kateryna Kryvenko, de 78 años, que recordó haber llorado a los pies de las autoridades soviéticas que requisaban la vivienda de su familia, confiscando la poca comida que tenían escondida bajo el piso. Los funcionarios se llevaron todo, y el padre de Kryvenko y tres de sus hermanos y hermanas murieron.

Durante la era soviética, la hambruna fue un secreto de estado, pero salió a la luz con los años. Diez países, entre ellos Estados Unidos, la reconocieron como un hecho genocida, definido como la destrucción deliberada y sistemática de un grupo racial, político o cultural.

El genocidio es un delito para la ley internacional.

El presidente del parlamento ucraniano Oleksandr Moroz dijo que avala el reconocimiento de la hambruna como genocidio, y expresó que el proyecto de ley del presidente podría llegar a la legislatura esta semana.

Algunos legisladores del Partido Regiones del primer ministro Viktor Yanukovych, avalado por Rusia, sugirieron que bloquearían la iniciativa, pero el legislador Taras Chornovil vaticinó que la propuesta del presidente será aprobada.

Crespones negros colgaban el sábado de la bandera nacional azul y amarilla, y en las ciudades de todo el país las autoridades dejaron flores en los monumentos a las cerca de 10 millones de víctimas.

Bajo el régimen estalinista, cada pueblo debía entregar al estado una cuota de granos, pero las demandas generalmente excedían la cosecha. Si una población no cumplía con los requerimientos, era colocada en una lista negra. El gobierno confiscaba entonces la totalidad de los alimentos y los residentes tenían prohibido alejarse de sus poblaciones, lo que en la práctica significaba que estaban condenados a morir de hambre.

Aquellos que se resistieron fueron fusilados o enviados a Siberia.(AP)
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo



  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados