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 sábado, 25 de noviembre de 2006  
Masacre de 21 chiíes en Irak; coalición mata a 22 insurgentes

Bagdad- Un grupo de hombres armados mató a 21 varones frente a sus parientes en dos casas chiítas de la provincia de Diyala, un refugio de la insurgencia sunita iraquí, informó la policía el sábado, mientras la coalición internacional anunció la muerte de 22 insurgentes y un civil en varias operaciones al norte de Bagdad.

El ataque en Diyala fue atribuido a insurgentes y cometido la noche del viernes contra miembros de la tribu chií al-Sawed en la localidad remota de Balad Ruz, 70 kilómetros al noreste de la capital iraquí, dijo un policía a condición del anonimato como medida de seguridad personal como acostumbran hacer las autoridades en esa provincia ante una inestabilidad en ascenso.

Indicó que la policía no pudo llegar la mañana del sábado a la localidad para recuperar los cadáveres y llevarlos a una morgue. La provincia, dividida en partes casi iguales entre suníes y chiíes, es escenario de numerosos ataques sectarios.

Bagdad permanecía el sábado bajo un toque de queda de 24 horas mientras las fuerzas de la coalición tratan de impedir un incremento de las represalias por los cinco atentados explosivos y dos ataques con morteros que el jueves causaron la muerte de 215 personas en el vecindario chií de Ciudad Sadr.

La violencia de ese tipo fue particularmente cruenta el viernes, cuando presuntos milicianos chiíes capturaron a seis sunitas cuando salían de mezquitas y los rociaron con queroseno para luego quemarlos vivos en el vecinario chiíta de Hurriyah.

En Bagdad, el mando militar dijo que las fuerzas de la coalición internacional mataron a 22 insurgentes y a un civil iraquí el sábado, además de que destruyeron un local usado para preparar bombas colocadas en caminos, durante varias operaciones al norte de la capital.

Los soldados realizaron tres incursiones simultáneas en torno a la ciudad de Taji y combatieron con insurgentes, de los cuales 10 fueron muertos, indicaron las fuentes militares. Taji se encuentra 20 kilómetros al norte de la capital iraquí y alberga una base aérea estadounidense de grandes dimensiones.

Un adolescente iraquí murió y una iraquí embarazada fue herida en el fuego cruzado, dijo el mando militar.

El local utilizado para elaborar bombas que son puestas al lado de caminos fue destruido por aviones militares de Estados Unidos, y los soldados que registraban la zona encontraron alijos de granadas que son lanzadas con cohetes, ametralladoras, armas antiaéreas y artefactos explosivos hechos con tubos.

Numerosos soldados estadounidenses han sido muertos o heridos en Irak por las bombas potentes que son colocadas al lado de caminos por los insurgentes.

En otra zona al norte de Bagdad, las fuerzas aliadas atacaron tres vehículos en que viajaban 12 insurgentes, incluido uno que era buscado por su presunta participación en el montaje de carros-bomba, afirmó la coalición. Los soldados abrieron fuego sobre los vehículos cuando los conductores ignoraron disparos de advertencia. Todos los milicianos murieron, dijo el mando militar.

En esa operación no hubo víctimas entre soldados y civiles. La coalición declinó precisar el lugar del ataque. (AP)
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