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miércoles,
22 de
noviembre de
2006 |
Ludovica Squirru presenta hoy su horóscopo chino 2007 en librería Ross
"Hasta el 2013 habrá que tolerar cambios climáticos imprevisibles"
El anuario número 25 describe cómo será el año del chancho que arranca el 18
de febrero próximo
Ludovica Squirru se ríe cuando le preguntan por qué decidió vivir sola en las sierras cordobesas. "¿Sola? Me casé con Buda y los doce animales del horóscopo chino hace 25 años", desafía la autora que cumple con este libro las Bodas de Plata de su mística profesión. El texto está basado en el año del chancho de fuego que comienza el próximo 18 de febrero, y sobre él dialogó con La Capital a pocos días de la tormenta que azotó a la ciudad. "De acá al 2013 habrá que tolerar cambios climáticos imprevisibles" en todo el planeta; "catástrofes -agregó-, que vienen de la mano del hombre".
De todos modos, avizoró buenos augurios para el chiquero rosarino. "Ustedes seguirán creciendo en materia cultural e inversiones, se recompondrán del granizo y continuarán en expansión". Su horóscopo 2007 se presentará hoy, a las 19.30, en Córdoba 1345 (altos de Librería Ross).
-Usted está convencida de que tendremos muchas más tormentas que lamentar.
-Sí, ustedes la han pasado fea el miércoles, los abrazo y les doy mi solidaridad. Creo que únicamente entendiendo que estamos atravesando catástrofes planetarias muy fuertes que tienen que ver con la mano del hombre comprenderemos por qué de acá al 2013 habrá cambios climáticos imprevisibles que no podrá medir siquiera el Servicio Meteorológico Nacional. Deberemos estar atentos a la contaminación de ríos y de mares; acostumbrarnos a vivir cuatro estaciones en un mismo día, pasar de 35 grados a 10, cosas de ese estilo que afectarán también al hombre, su estado anímico. La gente está desconcertada, no sabe cómo prepararse y creo que más que asustarnos debemos ser conscientes, por ejemplo no tomar sol en un momento en que sabemos que las radiación es nociva. Debemos atravesar esas pruebas, en Buenos Aires también hubo granizo y en Córdoba por poco se nos queman todas las sierras.
-¿Como será el año del chancho de fuego?
-Este signo es de mucho coraje y bondad, muy valiente; de tanta sensualidad y pasión que los chanchos pueden convertirse en jabalíes salvajes. No tienen término medio y necesitan tener poder sobre los demás, medio déspotas. ¿Cómo incidirá todo esto sobre los otros animales? No deberán esperarse cambios mágicos, la vida seguirá siendo consecuencia de lo que uno genera. Habrá que estar atentos porque el chancho intentará poner una cuota pacífica en un clima donde reina el poco diálogo, la violencia y el instinto. Habrá que retornar a lo esencial, a las pequeñas cosas de la vida: una buena comida, una conversación, estar en casa.
-Será un año eleccionario...
-Sí, en el que propongo votarse a sí mismo más que a quienes nunca sabemos si cumplirán. Debemos nosotros mismos tomar las riendas del país, hacernos cargo, hay que conectarse con la comunidad en el día a día; no con las urnas cada cuatro años. Ya hemos sufrido bastantes estafas morales. Los argentinos deberemos prepararnos para acoger a gente de todo el mundo, porque habrá guerras, epidemias y cierre de fronteras en otros lugares del planeta. Deberemos estar abiertos, recibir a la gente será nuestra misión.
-¿Cómo estará el país en el plano económico-social?
-Las iniciativas que se lleven a la práctica en el primer semestre serán más efectivas y producirán mayores satisfacciones. El país tiene más posibilidad de mejorar promediando el año, al final deberá cuidar algunos aspectos desestabilizadores en lo político y social, pero aún así se sostendrá en sus lineamientos.
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