Piquetes de intolerantes

Horas después de la tormenta regresaba por la autopista a Córdoba y me sorprendí al ver que muchos autos circulaban en el carril contrario que se dirige a Rosario. Esto era debido a que cinco intolerantes hacían que el tráfico diera la vuelta y regresara hasta el próximo intercambiador a 14 kilómetros. De milagro no se produjeron accidentes, y todo porque estos señores querían ayuda inmediata. Muchos tuvimos graves daños por el granizo al igual que ellos, y por eso no salimos a causar más problemas en una ciudad que no está preparada para este tipo de situaciones. A casi una semana de la tormenta en el barrio de Pichincha seguimos sin una completa respuesta, hay basura por todos lados, sin alumbrado público, con semáforos que están semi destruidos, etcétera, y eso que nosotros también pagamos los impuestos como supongo, sí supongo, que estos señores intolerantes lo hacen.

José Luis Ferraro, DNI 20.175.524