Año CXXXVII Nº 49298
La Ciudad
Política
Información Gral
El Mundo
Opinión
La Región
Policiales
Cartas de lectores
Mundo digital



suplementos
Ovación
Turismo
Mujer
Economía
Escenario
Señales


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 12/11
Mujer 12/11
Economía 12/11
Señales 12/11
Educación 11/11
Chicos pero grandes 11/11
Salud 08/11
Página Solidaria 08/11
Autos 26/10

contacto

servicios
Institucional


 domingo, 19 de noviembre de 2006  
López Obrador pone en marcha en México su contragobierno

Ciudad de México. - En el complejo tablero de la política mexicana Andrés Manuel López Obrador moverá mañana la siguiente ficha. A cielo abierto, en la mayor plaza de Ciudad de México, el líder izquierdista se investirá "presidente legítimo". Será un acto multitudinario, según se anticipa, que tendrá lugar diez días antes del verdadero traspaso de poderes en México del 1º de diciembre: la asunción del oficialista y ganador de las elecciones Felipe Calderón, a quien la izquierda considera coartífice de un fraude.

López Obrador, de 53 años, pretende erigirse en el único presidente de México con autoridad moral y política frente a un "pelele usurpador", como llama a Calderón, el segundo presidente de la democracia mexicana, después de 71 años de régimen hegemónico. Dice que el suyo será un gobierno itinerante que recorrerá cientos de municipios, que tendrá como objetivo "proteger los intereses del pueblo de México y el patrimonio nacional" y que convocará a movilizaciones cuando sean amenazados los intereses de México. Pero López Obrador, a quien los críticos acusan de debilitar las instituciones, no sólo busca incomodar a Calderón. Su plan de ruta tiene también una letra pequeña, afirman analistas políticos. El ex alcalde capitalino, que dominó la escena política en los últimos cuatro años, lucha por mantener su liderazgo dentro de la izquierda.

El acto del lunes "es un asunto que incumbe más a la izquierda que al país, y que tiene que ver con la supervivencia", dijo la analista política Denise Maerker. Para Maerker, López Obrador necesita luchar contra algo que "inevitablemente va a ocurrir", como es el hecho de que figuras de la izquierda que sí ocupen cargos públicos, como el próximo alcalde capitalino, Marcelo Ebrard, le disputen la primacía.

Aunque el "gobierno" paralelo de López Obrador será simbólico, generará una situación nueva en México, donde las instituciones tradicionales y también los partidos están siendo rebasados por la realidad.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo




  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados