Argentina admite el fracaso para frenar crédito del Banco Mundial

Raúl Estrada Oyuela, representante de asuntos ambientales de la Cancillería argentina, adelantó ayer que el Banco Mundial otorgará "el martes próximo" el crédito a la empresa Botnia para la construcción de su pastera en Fray Bentos, en Uruguay.

Estrada Oyuela señaló que "la CFI (Corporación Financiera Internacional) no está creada para proteger el ambiente, sino para hacer negocios particulares y este es su objetivo principal".

"Basta leer el comunicado que produjo la CFI, que parece un aviso comercial de Botnia, para ver que hay una fuerza puesta de la CFI para sacar adelante este proyecto, que consideran importante", explicó el funcionario de Cancillería.

Asimismo, dijo que "irreversible no hay nada, no vamos a entregarnos por esto, seguiremos marcando los errores que tiene todo esto", en alusión a la instalación de la pastera Botnia en la margen oriental del río Uruguay, construcción que generó una fuerte polémica entre la Argentina y el vecino país.

"Cuando una institución de esta naturaleza otorga un crédito lo condiciona al cumplimento de ciertas condiciones y lo vigilia. Vamos a operar sobre esta vigilancia", manifestó Estrada Oyuela.

Por otro lado, el funcionario opinó que "en gran medida, respondiendo al reclamo de la gente de Gualeguaychú, el presidente pensó, con buen criterio, que un personaje con relevancia como el rey de España podría facilitar el encuentro".

Agregó, además, que el monarca Juan Carlos I "es un señor muy respetado, es un rey democrático y constitucional. Creo que tiene la capacidad para actuar en estas condiciones".

"Nuestros hermanos uruguayos hace bastante que están equivocados, y siguen cometiendo errores", cerró.

A la crítica contra la entidad monetaria internacional se sumó también la secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti, quien afirmó que el Banco Mundial debería esperar los resultados de la gestión del enviado del rey español para facilitar el diálogo entre la Argentina y Uruguay antes de tomar una decisión final.

La funcionaria criticó lo que considera el "apresuramiento" y "la ansiedad" del Banco Mundial para aprobar el crédito para Botnia y aseguró que esta actitud "es inusual cuando hay un conflicto social importante, con relaciones diplomáticas entre dos países deterioradas y un cuestionamiento por parte de uno de los Estados respecto a la legalidad del proyecto".