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domingo,
29 de
octubre de
2006 |
Un partido a la
medida de Elizondo
El partido más trascendente y uno de los más convocantes de la fecha no podía prescindir del mejor árbitro argentino. Por presente y sobrados méritos, Horacio Elizondo es el hombre indicado para impartir justicia en el Central-Newell's de hoy en el Gigante.
Será el séptimo clásico que arbitrará el representante argentino en el Mundial 2006, coronado con una actuación brillante en la final entre Italia-Francia. Su currículum registra cinco empates y un triunfo canalla.
El choque rosarino más recordado de los últimos tiempos también lo tuvo como protagonista. Elizondo dirigió aquel partido que Central consiguió una victoria histórica ante Newell's y lo eliminó de la Copa Sudamericana con gol de Rivarola.
Los otros encuentros que arbitró estuvieron signados casi todos por empates sin goles y algunas jugadas polémicas como aquel gol anulado al chaqueño Herrera el 19 de octubre de 2003, cuando canallas y leprosos empataron 1 a 1.
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