|
domingo,
01 de
octubre de
2006 |
La provincia aporta lo que no puso la privada
"En 1995 Aguas Provinciales de Santa Fe prometió agua potable para todos los santafesinos en diez años y cloacas para todos ellos en 2007, con una inversión de unos 1.200 millones de dólares", informó una fuente de Aguas Santafesinas que acredita una extensa trayectoria en la problemática.
A un par de meses de ver el sueño de la canilla y la cloaca propias hecho realidad, la promesa de la empresa privada aparece como una buena declaración de campaña, dado que no sólo incumplió las obras prometidas sino que, además, no invirtió ni remotamente los millones de dólares anunciados.
La mitad de los santafesinos carece de acceso integral al agua, como denuncia el dirigente de la Asamblea por los Derechos Sociales, Aníbal Faccendini, un dato negado por voceros del Ministerio de Asuntos Hídricos y de Aguas Santafesinas, aunque implícitamente aceptan la falta de presión de agua en varios barrios periféricos de nuestra ciudad.
Aguas Provinciales no sólo no invirtió los 1.200 millones de dólares prometidos, sino que, además, cobró el aumento del 12,85 por ciento de 1999 y prácticamente no hizo las obras que debía, apañada por la sugestiva complicidad de un Estado ausente.
La Asamblea Provincial del Agua, que se había opuesto a la privatización, convocó en 2003 a un plebiscito en el unos 260 mil santafesinos votaron por la rescisión del contrata con Aguas Provinciales. "El mayor problema es la desinversión en infraestructura sanitaria. Aguas puso plata hasta el año 2000, pero en los últimos seis años no invirtió, en parte por la crisis de 2001 y en parte porque no le interesaba", abundó la fuente de Aguas Santafesinas, que ahora es una sociedad anónima del Estado.
"Aguas Santafesinas y el Ministerio de Asuntos Hídricos invertirán en un bienio lo que puso Aguas Provinciales en seis años: unos 160 millones de pesos", informó el vocero consultado en la sede rosarina de la empresa.
Las partes de la ADS y Aguas Santafesinas coinciden en que el agua debe ser administrada por una empresa estatal con participación social y comunitaria. "No nos sirve el modelo de empresa estatal del siglo XX ni el de la empresa privada que toma un mercado cautivo como el del agua", advirtió Faccendini.
Así, luego de décadas de gestión estatal de la Dipos y la década neoliberal del 90 con una fuerte desinversión en infraestructura, la flamante Aguas Santafesinas y el Ministerio de Asuntos Hídricos están invirtiendo en los servicios sanitarios, una cuestión en la que el acceso integral al agua constituye la deuda interna con vastos sectores de la población de nuestra provincia.
enviar nota por e-mail
|
|
|