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miércoles,
06 de
septiembre de
2006 |
Fórmula Uno: ahora Monza no es un circuito seguro
Varios pilotos están preocupados ante posibles accidentes en el trazado más emblemático de la F1
Varios pilotos de Formula Uno, encabezados por el campeón mundial, Fernando Alonso, cuestionaron ayer la seguridad del autódromo de Monza, donde el domingo se correrá el Gran Premio de Italia, y pidieron medidas para que se vuelva menos peligroso.
"Debido a la escasa carga aerodinámica con la que se gira, uno desde el habitáculo tiene siempre la sensación que no todo está bajo control, no es una sensación simpática, pero es el único modo de ser veloz en las largas rectas", afirmó Alonso.
Según el español, "hay márgenes para intervenir" y el tema estará bajo análisis en la reunión que habitualmente, antes de cada Gran Premio, efectúa la Grand Prix Drivers Association (GPDA) que agrupa a los pilotos.
Por su parte, el australiano Max Webber, de Williams, pidió a la Federación Internacional del Automóvil (FIA) que intervenga para reducir, dentro de lo posible, los riesgos que presenta el trazado, que es el más veloz de la Fórmula Uno.
Para Webber, Monza plantea un dilema: "Por más que se haya pasado de los motores V10 a los V8 las potencias no han disminuido, el único camino es mejorar la seguridad de los circuitos, a comenzar por el italiano".
Sobre el tema ironizó David Coulthard, del Red Bull Racing: "En Monza casi siempre pasa algún episodio desagradable, ya estamos acostumbrados y afrontamos cada edición con un poco de resignación", según informó el piloto.
Quejas de Renault
La escudería Renault cuestionó ayer las ruedas traseras que ferrari presentó en el Gran Premio de Turquía y se reservó el derecho de protestar oficialmente si las vuelve a usar en Monza el domingo.
"Ferrari puede estar violando las reglas, ya que cuando cambia las gomas en régimen de parque cerrado, tras la clasificación del sábado, podría cambiar también el sistema de refrigeración de los frenos", sostuvo Pat Symonds, director general de Renault.
Schumy y los tifosi
Michael Schumacher, el hombre récord de la Fórmula Uno con siete títulos mundiales a cuestas, confía para el domingo, cuando se dispute el Gran Premio de Italia en Monza, en la magia de sus seguidores locales y los fanáticos de la escudería Ferrari.
"Como en años anteriores llegamos a Monza con desventaja de puntos en el campeonato mundial, pero con el firme deseo de revertir la situación precisamente en este Gran Premio", fundamentó ayer Schumacher.
El Gran Premio de Italia despertó además mayor expectativa de lo normal porque después de esa carrera Schumacher quiere anunciar su decisión de si sigue corriendo en la Fórmula Uno en la próxima temporada o si se retira, determinación que sin ninguna duda será noticia.
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