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 domingo, 03 de septiembre de 2006  
Dos detenidos por el crimen de una muchacha
Es una pareja imputada de matar a Romina Castañeda, quien el 20 de julio recibió dos puñaladas en el pecho

Un hombre y una mujer fueron apresados en la zona sur de la ciudad acusados del crimen de una muchacha de 23 años ocurrido el pasado 20 de julio. Desde hacía al menos un par de semanas los agentes de la Brigada de Homicidios le seguían los pasos y sabían que se aguantaban en inmediaciones de San Martín y Uriburu. A media tarde de ayer los sorprendieron caminando y los llevaron a Jefatura a disposición del juez que entiende en el caso.

El hecho que les imputan ocurrió el último Día del Amigo. Entonces, Romina Natalia Castañeda estaba alojada en una casa de Teniente Agnetta al 2200. Allí reside un hombre que se gana la vida vendiendo praliné en el centro de la ciudad y al que sus vecinos califican como "un tomador de mala junta". Aunque, afirman, "es incapaz de matar a alguien". Por entonces, en esa casa también se alojaba una pareja que despertaba la desconfianza de los habitantes de la zona.

Lo cierto es que poco después de las 23 de aquella jornada, Romina cayó malherida frente a la vivienda. La chica fue derivada al Hospital de Emergencias Clemente Alvarez pero murió apenas empezaron a atenderla. Al mismo tiempo, los policías llegaron a la casa de calle Teniente Agnetta y encontraron la puerta cerrada con llave. Adentro ya no había otras personas.

Lo único que encontraron los detectives aquella noche fue un número de teléfono entre las pertenencias de Romina. Así se contactaron con los únicos familiares de la chica y conocieron una historia desoladora. Es que la piba se había ido de su casa cuando era adolescente y desde entonces anduvo sin domicilio fijo, abandonada y ligada al ejercicio de la prostitución y el consumo de drogas.

Pero los pesquisas también supieron a través de los vecinos que en esa vivienda "entraba y salía gente permanentemente", que el dueño de casa "tenía mala junta y estaba muy mal rodeado" y que desde el 9 de julio estaba instalada en la vivienda una pareja. "Ella es una mujer rubia teñida que parece un varón y anda siempre con una vincha y el un hombre robusto de pelo largo hasta los hombros", comentaron los vecinos.

Por los relatos de la gente, los policías también supieron que un rato antes del crimen se escuchó al dueño de casa gritar: "No quiero que estén más aquí, váyanse". Y que después dos hombres y una mujer se fueron del lugar dejando todo cerrado y el cuerpo sangrante de Romina sobre la vereda, dejando una huella que se metía en la casa.

Y sobre esa gente puso la mira la gente de Homicidios. Así llegaron a detener ayer a Claudia Liliana Ledesma, una mujer de 34 años apodada Chitara, y Nelson Santa Cruz, de 31. Ella no es la primera vez que va a Jefatura. El 28 de noviembre del año pasado ya la habían apresado por pedido de la Justicia de Mar del Plata en torno a un homicidio ocurrido allí hace unos tres años atrás, cuando la mujer ejercía la prostitución en la temporada veraniega.
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