Año CXXXVII Nº 49221
La Ciudad
Política
Información Gral
El Mundo
Opinión
La Región
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Turismo
Mujer
Economía
Escenario
Señales


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 27/08
Mujer 27/08
Economía 27/08
Señales 27/08
Educación 26/08
Autos 24/08
Salud 23/08
Estilo 19/08

contacto
servicios
Institucional


 domingo, 03 de septiembre de 2006  
Tiro ganó en Ludueña tras casi dos años

Lucas Vitantonio / La Capital

Tiro Federal logró romper el hechizo que le impedía ganar en su cancha y ayer se impuso con claridad, aunque pasando algunos sobresaltos en el final, al débil Villa Mitre de Bahía Blanca. Los Tigres se sacaron la mufa que los acompañaba en el Fortín de Ludueña aprovechando al máximo el gol de la figura de la cancha, Federico Barrionuevo.

El 1 a 0 fue justo y hasta la ventaja pudo ser mayor, pero la ansiedad por la victoria replegó en los minutos finales peligrosamente al equipo tirolense, que pasó más de un sofocón hasta poder quebrar el maleficio que tenía actuando en su patria chica.

Hasta ayer, la última vez que los Tigres habían ganado en Ludueña fue el 10 de octubre de 2004 (5 a 2 ante San Martín de Mendoza). Y desde allí pasaron 8 partidos sin cantar victoria en el Fortín. Además la última vez que habían triunfado en condición de local fue ante Newell's, paradójicamente en el Coloso, por 2 a 1, el 2 de febrero pasado cuando Tiro estaba en primera división.

Los datos no hacen más que evidenciar que los Tigres cargaban con una mochila demasiado pesada cada vez que jugaban de local. Por ello se entiende el desahogo de los dirigidos por Leonardo Abratti ayer luego de consumada la victoria por la mínima diferencia. Si hasta los hinchas debieron pellizcarse para corroborar que podían celebrar al fin un triunfo en su propia casa.

Claro que la historia no fue sencilla, a pesar de la fragilidad de un rival que ofreció demasiadas ventajas y no se le cayó ninguna idea a lo largo de los 90 minutos.

En el primer tiempo Tiro mostró su mejor semblante y generó cinco situaciones clarísimas de gol, que por falta de precisión o por destreza del arquero visitante Diego Fernández (ex Central Córdoba) no pudo concretar. La más clara la protagonizó Santiago Bianchi, que estrelló un cabezazo en el travesaño luego de un centro de Barrionuevo.

Tiro hizo mejor las cosas pero no pudo materializar la clara diferencia en el resultado. En el segundo tiempo el juego se volvió más friccionado y los Tigres torcieron el rumbo aprovechando una pelota detenida. A los 5 minutos Marcelo Penta ejecutó un córner, Eduardo Vilce peinó la pelota y Barrionuevo facturó.

Con ese gol le alcanzó al conjunto de Ludueña para despejar los fantasmas que invadían desde hace un tiempo su morada. Todavía hay mucho por corregir si quiere ser protagonista, en especial en el aspecto defensivo, donde por momentos el equipo se mostró rústico y desprolijo. Por ahora se puede decir, al menos, que "la casa está en orden".
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
Penta cabecea ante la marca de Mugnaini.

Notas Relacionadas
Para renovar la confianza

Platense y Defensa son escoltas




  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados