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domingo,
03 de
septiembre de
2006 |
Córdoba sumó y sigue invicto
En una cancha difícil y con un campo de juego en muy malas condiciones, el 0 a 0 ante Estudiantes dejó conforme a Central Córdoba que sigue invicto y bien posicionado, ya que tiene un partido menos.
La tarde de Caseros se fue en amagues. Y no se trata de un metáfora con la intención de describir la habilidad de los jugadores, sino para relatar todo lo que se insinuó y lo poco que se concretó. Incluso el clima fue cómplice de ese juego y el sol y la llovizna coqueteaban con el intenso frío.
Desde el comienzo quedó clara la intención de Estudiantes de ir a buscar el partido y ya a los tres minutos tuvo una muy clara que Martín, luego de una buena jugada colectiva, desperdició junto a un palo. Todo fue del Pincha hasta los 20', que llegaba tocando bien y en velocidad, generalmente por izquierda y ante un desbordado Raponi que no sabía si salir a cortar o quedarse. Pero el charrúa ajustó las marcas y, si bien no creció futbolísticamente, provocó un claro declive en el juego del local. Bezombe manejó un poco más la pelota y se intentó aprovechar el hueco que dejaba Umbides, que subía pero se olvidaba de bajar. Así aparecieron las primeras chances para Córdoba, pero el pésimo estado del campo de juego perjudicó a Armani en dos ocasiones.
La primera mitad se fue con una carambola que casi termina en gol luego de un mano a mano que Santilli le tapó a Graieb, ya que la pelota volvió a pegarle al mellizo antes de irse pegada al palo.
El charrúa arrancó con todo en el complemento y armó la mejor jugada del partido pero Armani no estaba en su tarde y tras recibir un taco, que lo dejó solo frente a un arco y sin arquero, le pegó suave y se la sacaron en la línea. Fue sólo un espejismo porque, si bien Pierani tuvo una clara a los 18 minutos tras un centro que Cáceres calculó mal, Córdoba no pudo sostener la propuesta.
Estudiantes no hizo mucho más y no fue, ni por asomo, el mismo que el del primer tiempo. Aunque también tuvo su chance a los 22' cuando Pablo González casi rompe un palo.
El frío se apoderó de la tarde y también ganó la noche. En el juego de seducción al que entraron, Central Córdoba y Estudiantes coquetearon con el buen juego e intentaron quedarse con los tres puntos. Ninguno se fue a casa con las manos vacías pero tampoco lograron cumplir con su cometido.
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