La inflación de agosto se ubicó entre el 0,3 y el 0,5%

Buenos Aires.- El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundirá pasado mañana la tasa de aumento del Indice de Precios al Consumidor (IPC, costo de la vida) durante agosto, que, según fuentes oficiales, habrá sido de entre 0,3 y 0,5 por ciento.

Una tasa de ese nivel sería similar a la de 0,4 por ciento registrada en igual mes del año pasado.

De confirmarse un resultado de esa magnitud, la inflación minorista acumulada en los primeros ocho meses de este año habrá sido inferior a seis por ciento, claramente por debajo de la de 7,7 por ciento registrada en igual lapso de 2005.

Para alcanzar una tasa menor a medio punto porcentual gravitó favorablemente la vigencia de los acuerdos de precios, que posibilitó que los precios de los alimentos se mantuvieran sin grandes variaciones, lo que benefició especialmente a los sectores de menores ingresos.

También influyó la caída de los precios de la indumentaria, alentada por las liquidaciones del fin de la temporada invernal.

Asimismo, colaboraron a frenar cualquier expectativa inflacionaria la estabilidad de los precios de los automóviles -tras una suerte de acuerdo tácito entre el Gobierno y la industria- y los alquileres, que parecen haber alcanzado un techo.

En cambio, los demás rubros que no están alcanzados por los acuerdos mostraron nuevas alzas de precios, tales como las cuotas de las prepagas médicas, los colegios privados y aquellos servicios de esparcimiento, debido a las vacaciones de invierno.

También contribuyeron en ese sentido los aumentos de las tarifas de algunos rubros del transporte de pasajeros, tales como los taxis y los vuelos de cabotaje.

A ello debe sumarse el impacto de la suba de los precios de algunas marcas de cigarrillos, fenómeno que se repetirá este mes.

Los economistas que participan del Relevamiento de Expectativas (REM) que realiza el Banco Central previeron a comienzos de agosto una inflación de 0,6 por ciento para el mes pasado y de 10,9 por ciento para todo el año.

Vale destacar que agosto y septiembre son dos meses que aportan pocas razones estacionales al alza de los precios, debido principalmente a las liquidaciones de ropa por cambio de temporada.

No obstante, en agosto habitualmente tiende a subir el precio de la carne debido a la reducción de la oferta, algo que no sucedió este año porque la sequía que afecta a vastas regiones ganaderas estimuló a los productores a sostener el volumen de sus envíos a los mercados concentradores.

A la luz de esas estimaciones, la economista Florencia Arcieri, del estudio Orlando Ferreres y Asociados, consideró que “el Gobierno se está acercando al objetivo de cerrar el año con una inflación de un dígito”. (Telam)