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 lunes, 21 de agosto de 2006  
Protesta de indígenas bolivianos amenaza la venta de gas a Brasil
Un grupo de guaraníes ocupó las instalaciones de un gasoducto clave en demanda de unos 9 millones de dólares

La Paz. - Una protesta protagonizada por miembros de la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG) que ocuparon una estación gasífera en el suroeste de Bolivia amenazaba ayer con poner en riesgo la exportación de gas a Brasil, según informó la prensa local. Entretanto, el presidente del país, Evo Morales, quien en estos días está enfrentando una crisis ministerial, dijo ayer estar "cabreado" (molesto) por la burocracia y anunció medidas para acelerar las inversiones.

Los indígenas guaraníes ocuparon las instalaciones de la estación de Transierra Parapetí, en la localidad de Tatarenda (departamento de Santa Cruz), para exigir el pago de derechos de servidumbre por el paso del gasoducto, según el diario El Deber. No descartaron la posibilidad de radicalizar su protesta, con el cierre de las válvulas del gasoducto a Brasil o con un bloqueo de la ruta que conecta a Bolivia con Argentina, se informó.

Los manifestantes exigen unos nueve millones de dólares que, de acuerdo con Wilson Changaray, presidente de la APG, servirían para desarrollar programas productivos. La protesta se inició con una ocupación simbólica de una estación de compresión, pero "en las últimas horas (los guaraníes) ingresaron a las instalaciones (de Transierra)", argumentando que "no les dan respuestas", explicó el diario.

Transierra, conformada por la brasileña Petrobras, la hispano argentina Repsol YPF y la francesa Total, administra el gasoducto Yacuiba-Río Grande, que tiene una capacidad para transportar alrededor de 11 millones de metros cúbicos del carburante por día.

La transportadora indicó en un comunicado que "aún cuando se demostró predisposición al diálogo y el compromiso de cumplir a cabalidad el convenio, se ha encontrado una posición intransigente y unilateral del pueblo guaraní".

El Deber señaló que el año pasado se firmó un compromiso para ejecutar un plan de desarrollo indígena en los próximos 20 años, cuya administración debió ser compartida. Al no cumplirse lo acordado, los guaraníes demandaron la entrega de los recursos. Sin embargo, Transierra precisó que su aporte al plan de desarrollo -de nueve millones de dólares- está previsto para los próximos 20 años.

Bolivia, el país con las segundas mayores reservas gasíferas de la región, exporta diariamente a Brasil -su principal mercado- unos 24 millones de metros cúbicos diarios de gas natural.

Mientras tanto, Evo Morales anunció que en los próximos días el gobierno presentará un proyecto de ley para "desburocratizar" la licitación y la aprobación de proyectos, y ratificó un ambicioso plan de desarrollo que prevé inversiones públicas por 12.600 millones de dólares hasta el 2011.

Bolivia ha enfrentado dificultades administrativas y obstáculos operativos para proceder a los cambios prometidos por Morales como clave para "descolonizar" al país más pobre de Sudamérica y acelerar su crecimiento.
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Evo se reunió hace poco con los líderes indígenas de su país.


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