Sandro festejó sus 61 años rodeado de sus "nenas"

El cantante Roberto Sánchez, conocido popularmente como Sandro, festejó ayer su cumpleaños 61 acompañado por una multitud de fanáticas, a las que agradeció emocionado la vigilia que hicieron frente a su casa de Banfield, en el sur del conurbano bonaerense.

Sandro se asomó minutos antes de las 16 por una de las puertas de su casa e hizo delirar a las "nenas", tal como llama afectuosamente el Gitano a sus seguidoras, y les agradeció las reiteradas muestras de afecto incondicional.

"Es un placer muy pero muy grande el poder volver a estar con ustedes. Me hace muy feliz que hayan venido", se emocionó Sandro tras recordar la complicada neumonía que el año pasado lo obligó a permanecer internado varios meses en el Instituto del Diagnóstico porteño, que hizo que celebrara sus 60 años recién el 5 de noviembre pasado.

Las fanáticas de Sandro volvieron a repetir la tradicional vigilia que organizan para cada 19 de agosto frente a la casa del popular cantante, sobre la calle Berutti al 200, en una zona residencial de Banfield.

Como cada año, las "nenas" matizaron la espera hasta la aparición del ídolo con rondas de mates, cánticos y la confección de pancartas y carteles alusivos al autor de "Dame el fuego de tu amor", "Rosa, Rosa" y "La vida sigue igual", entre otros éxitos.

Las primeras en llegar, cuando promediaba la semana, fueron las más afortunadas: una asistente de Sandro les entregó un número para que tengan el privilegio de entrar a la casa del cantante y tomarse fotografías con él.

Momentos antes de las 16 Sandro se asomó por la puerta vestido con una campera negra y blanca que lo protegía del frío, de buen semblante y risueño.

"Hola mis bebés, hola mis nenas", fue lo primero que dijo Sandro y provocó un aullido de delirio y furor entre las mujeres apostadas frente a él.

En su segunda aparición pública de la semana tras haber estado el lunes en el Senado de la Nación para recibir la distinción "Domingo Faustino Sarmiento" en reconocimiento a sus 40 años de trayectoria, Sandro se dedicó a tirar besos a las presentes y hasta dio un paso de baile gitano, con una mano sobre su cabeza mientras simulaba tocar las castañuelas. (DyN)

El ídolo frente a su casa de Banfield.