Marketing imprudente

En la tarde del domingo 13 de agosto fui con mi familia al Parque Alem y estacioné el auto sobre la costanera, en la mano que va hacia el centro. Tras unos minutos, arribaron varios camiones y furgones de una conocida marca de helados, que ya habían pasado por la mano contraria un rato antes, custodiados por varias motos de policía de tránsito, regalando helados a la gente. Cuando pararon, decenas de personas (sobre todo niños) se acercaron corriendo y rodearon varios automóviles incluido el mío con el fin de alcanzar alguno de los helados que arrojaban. Entonces, varios niños empezaron a correr hacia los camiones pasando entre los autos, mientras que unos pocos lo hicieron directamente sobre los techos y capots de los mismos, creando un gran descontrol de empujones y caidas. En ese momento me acerqué a algunas personas contratadas por la empresa, para pedirles que arrojaran los helados desde la vereda (lo estaban haciendo detrás de ellos, a un metro de distancia) o bien se detuvieran hasta que la gente se calme y los dejaran proceder con calma. Hicieron caso omiso y continuaron, aduciendo que no podían llegar a la vereda porque antes los chicos los alcanzaban a ellos y les quitaban los helados. Señores de Com Com, creo que su promoción ha tenido éxito porque lograron su cometido marketinero, pero también creo que deberían educar a sus promotores para que procedan de una manera correcta con todas las personas, no sólo con sus potenciales clientes, porque fue una verdadera falta de respeto y una manifestación de desinterés no atender al reclamo de los propietarios de los vehículos, que desesperadamente les pedimos que pararan o arrojaran los helados desde otro lado.

Javier Osvaldo Retorto, DNI 28.390.621

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