Los estrenos bajo la lupa de Escenario

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"La prueba"
Calificación: 4 estrellas. Intérpretes: Gwyneth Paltrow, Jake Gyllenhall y Anthony Hopkins. Dirección: John Madden. Género: drama. Salas: Del Siglo, Monumental, Showcase y Village.

"La prueba" tiene un valor superlativo si se la observa con un sentido metafórico. La pieza de David Auburn, cuya puesta se vio en Rosario con las actuaciones de Gabriela Toscano, Pablo Rago, Osvaldo Santoro y Carola Reyna, es una historia que deja al descubierto las debilidades de los vínculos familiares y los riesgos de obsesionarse con una profesión. Un prestigioso matemático (Anthony Hopkins) pierde la vida en la búsqueda de una ecuación casi imposible, mientras su hija Catherine (Gwyneth Paltrow) posterga su carrera y sus sueños para cuidarlo. La vida de Catherine está llena de grises, pese al amor pasajero de Hal (Jake Gyllenhaal) y a los intentos vanos de su insufrible hermana Claire (Hope Davis). Una prueba matemática revelará misterios en una trama bien llevada por el director John Madden, cuya mayor virtud fue ganar agilidad e interés en una historia que en teatro se torna densa. Las actuaciones de los protagonistas jerarquizan el filme en un elenco donde sobresale Gwyneth Paltrow, en una de sus interpretaciones más expresivas.

P.S.
"Enredos del corazón"
Calificación: 3 estrellas. Intérpretes: Joan Allen y Kevin Costner. Dirección: Mike Binder. Género: comedia dramática. Salas: Del Siglo, Monumental, Showcase y Village.

Terry está amargada, y no es para menos, una mañana se levanta y se encuentra que su marido había desaparecido. En la oficina confirman sus sospechas: su esposo y su secretaria no fueron a trabajar. Abandonada, con cuatro hijas adolescentes a cargo, se hunde en la bebida. La acompaña un vecino, un jugador de béisbol retirado que se gana la vida como conductor de un programa de radio y vendiendo pelotas autografiadas. Ambos se sienten fracasados, sin más que hacer que mirar la televisión y beber una copa tras otra. El romance es inevitable. También, los sobresaltos por tener que lidiar con teen-agers. La actuación de Joan Allen, como el ama de casa desesperada, es brillante, pero su esfuerzo choca, primero, con los lugares comunes en los que cae su partenaire, Kevin Costner, y después, con el guión, que propone los conflictos habituales de la comedia dramática clásica. Salvo el final, que encierra una sorpresa, la historia es previsible y también deliciosa.

R.L.


"La marcha de los pingüinos"
Calificación: 3 estrellas. Relatos: Morgan Freeman, doblada al castellano. Dirección: Luc Jacquet. Género: documental. Salas: Del Siglo, Monumental, Showcase y Village.

La migración del pingüino emperador y su fenomenal lucha contra las adversidades del clima antártico fue el tema que le permitió a Luc Jacquet, el guionista y director de la película, redondear una obra que abarca los diferentes perfiles que puede mostrar el cine. Resulta didáctica por el valor testimonial que cobra el largo camino que emprenden los pingüinos desde el mar hasta el lugar de apareo y el que luego inician las madres para conseguir el alimento que garantizará la vida del polluelo que queda a cargo del padre durante los meses de crudo invierno.

Tenacidad, fidelidad y amor familiar son los valores que se reivindican con la parábola de un viaje que se transforma en ejemplo de vida. El equipo que logró las extraordinarias imágenes de esa verdadera lucha por la supervivencia también se jugó el cuerpo en la obra y obtuvo, además de un buen producto cinematográfico, un premio Oscar de la Academia de Hollywood. Una película para ver en familia.

M.M.
"Alta tensión"
Calificación: 2 estrellas. Intérpretes: Cecile de France, Maiween, Philippe Nahon, Frank Khafoun y Andrei Finti. Dirección: Alexandre Aja. Género: terror. Salas: Monumental y Village.

A este filme francés de terror, en el que dos jóvenes son asediadas por un psicópata en una granja aislada durante toda una noche, lo condena la mediocridad de un libro que no hace más que repetir fórmulas ya gastadas. Al comienzo, el asesino no es más que una sombra corpulenta, que existe a través de su pesada respiración, de sus pisadas vacilantes, su navaja y su overol. Después, la película tiene algo a favor pero que, por lo inverosímil, se vuelve en contra del producto: una sorpresa final demasiado increíble. En "Alta tensión", el director Alexandre Aja nunca se propuso incorporar a la historia elementos paródicos, e intentó plasmar un relato escalofriante a partir de manipular los miedos básicos de los espectadores: a lo desconocido, a la oscuridad, a la claustrofobia y al significado de la muerte. El intento es válido, pero el resultado bastante flaco, a pesar de que el filme fue producido por Luc Besson, el exitoso productor y director de "Nikita", "El perfecto asesino" y "El quinto elemento".

J.C.
"Nordeste"
Calificación: 4 estrellas. Intérpretes: Aymará Rovera y Carole Bouquet. Dirección: Juan Solanas. Género: drama. Salas: Monumental y Showcase.

El director Juan Solanas aborda en su primer largometraje las que, según lo muestra, serían algunas de las consecuencias de la pobreza: una madre que vende a su hijo, la adicción a las drogas, la delincuencia, la imposibilidad de acceder a cosas elementales como la educación, la salud y la alimentación, y también la violencia que los poderosos ejercen sobre ellos. Solanas pone en el centro del relato a dos mujeres que terminan unidas por la frustración.

Las protagonistas son Juana, a cargo de Aymará Rovera, y Helene, interpretada por Carole Bouquet. Juana apenas sobrevive en un rancho en medio del campo, con un hijo adolescente y un amante casado que la deja embarazada. Helene es una francesa de clase media alta que después de que fracasa la posibilidad de adoptar un bebé legalmente en Buenos Aires, acepta una propuesta claramente ilegal. Para Helen se trataba de un viaje un poco fastidioso a un lugar exótico donde ella dejaría satisfecha su necesidad de ser madre después de comprar un bebé, y explica la transacción con las reglas del mercado: oferta y demanda. Pero las cosas tampoco resultan allí como esperaba y el viaje resulta ser una revelación y también una especie de redención.

Solanas compensa la densidad del tema con un tratamiento sutil de la imagen sin que por eso sus decisiones estéticas interfieran o disimulen el tema de fondo. Los lentos paneos, los prolongados planos secuencia, la textura de la que difumina los contornos de las personas y el paisaje, la hora elegida para rodar determinadas escenas y la clara dirección de actores, hacen de "Nordeste" un filme singular sobre un tema que Solanas intenta profundizar más allá de ser una situación lamentable.

R.B.