Yoga: buena preparación para el parto

El cuerpo es captador de emociones, y vehículo de todas las sensaciones que se expresan con un simple gesto, con la voz o con la fluidez del movimiento. El buen uso del tiempo libre, la actividad física, una buena alimentación y un descanso apropiado permiten manejar nuestros estados, tanto físicos como emocionales, de manera diferente.

Resulta importante tomar conciencia de nuestro cuerpo, respetarlo, reconocerlo y escucharlo ya que el sedentarismo y la mala predisposición generan rigidez, agotamiento físico, falta de coordinación y de concentración perjudicándonos en la vida cotidiana. La práctica del yoga científico genera beneficios y cambios, reduce el estrés, contribuye a sentirse relajado y ayuda a mantener en buen estado la salud porque trabaja directamente sobre los sistemas nervioso, endócrino, circulatorio, respiratorio, digestivo y urinario (también alivia problemas de columna, contracturas musculares y artrosis).

Las sesiones de yoga para embarazadas apuntan a responder a las necesidades particulares de la futura mamá, y a enfrentar esa etapa en las mejores condiciones posibles. La embaraza en el momento del parto podrá dejarse "llevar" por su mecanismo corporal (al que sabrá escuchar porque lo conocerá mejor), y abandonarse a esa "fuerza de vida" respetando el ritmo a través de la respiración. Cuanto más temprano y correctamente se efectúe la preparación, la mamá durante el nacimiento tendrá la sensación de ser un pasaje para la nueva vida sin obstáculos que la hagan sufrir.

Mónica Oteo Sánchez

Master en yoga científico

Asistente en embarazo