Tras meses de agonía, murió una médica baleada por su ex pareja

Buenos Aires.- Tras seis meses de agonía la médica nutricionista platense Ana María Rossi, que permanecía en coma desde octubre tras ser baleada por una ex pareja, falleció ayer a causa de complicaciones en las graves lesiones que había recibido.

La mujer tenía 36 años y nunca pudo salir del coma profundo. El deceso se produjo poco después de las 7.30 en el hospital San Roque de la localidad de Gonnet, tras los tres balazos que disparó sobre ella su ex pareja, el visitador médico Agustín Arrien, detenido y procesado por "abuso de arma, lesiones graves y abuso sexual".

El 3 de octubre, Arrien se presentó ante la policía para denunciar que cuando iba en auto con la mujer en la localidad de City Bell, un joven armado los interceptó y se llevó a la médica, quien apareció el martes 4 por la mañana en Villa Elisa con tres disparos, dos en la cabeza y uno en el pecho. Estaba casi congelada, tras haber quedado malherida en un zanjón toda la noche.

Investigadores del hecho comenzaron a sospechar del visitador médico, especialmente luego de que familiares de la víctima revelaron que Rossi sufría amenazas y presiones de parte de Arrien, en desacuerdo con la decisión de la mujer de dejarlo para volver con su marido, del que se hallaba transitoriamente alejada.

Al verse cercado por las evidencias, Arrien confesó ante el fiscal platense Marcelo Martini que en la madrugada del 4 de octubre había sido él quien descerrajó cuatro disparos contra Rossi, tres de los cuales la hirieron gravemente.

El visitador médico, de 46 años, había pasado a buscar esa noche a Rossi en un Ford Sierra, en el cual la nutricionista le hizo saber su decisión de volver con su marido, Daniel Stupiello, y sus tres hijos, dos varones de 17 y 10 años, y una niña de 7.

"Me sentí degradado, no aguanté más esa situación y ahí comencé a disparar", dijo Arrien en su confesión ante el fiscal Martini. En ese momento el juez de Garantías de La Plata Guillermo Atencio procesó con prisión preventiva al visitador médico, y lo acusó por "abuso de arma y lesiones graves".

La situación judicial de Arrien se agravó el 17 de febrero cuando el juez Atencio dispuso procesarlo también por el delito de "abuso sexual", luego de que pericias médicas confirmaron que Rossi había sido ultrajada.

Tras el ataque, la nutricionista fue internada en el hospital San Roque, de Gonnet, donde la sometieron a intervenciones quirúrgicas para extirparle los tres proyectiles que estaban alojados en su cuerpo, lapso en el que siempre permaneció en estado de coma profundo.

Arrien, detenido en la Unidad Penal 25 de Lisandro Olmos, destinada sólo a evangelistas, es defendido por el abogado Carlos Irisarri, letrado del dentista Ricardo Barreda, quien mató a tiros a toda su familia y basó su defensa en que no pudo "comprender la criminalidad" de sus actos.

Idéntica teoría tratará de sostener ahora con Arrien, sobre la base de demostrar que tuvo "algún trastorno" que le impidió entender lo que hacía, habían confiado a DyN fuentes de la justicia platense al momento de confirmarse la prisión preventiva para el sospechoso. (DyN-Telam)