Año CXXXVII Nº 49081
La Ciudad
Política
Economía
Información Gral
Opinión
La Región
Escenario
El Mundo
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Educación


suplementos
ediciones anteriores
Salud 12/04
Página Solidaria 12/04
Turismo 09/04
Mujer 09/04
Economía 09/04
Señales 09/04
Educación 08/04
Estilo 18/03
En el aula 18/03

contacto
servicios
Institucional

 sábado, 15 de abril de 2006  
Un informe del Cippec revela que las compras realizadas por el gobierno nacional entre el 2004-2005 casi duplican a las del Plan Social entre 1998 y 1999
Una deuda para los alumnos más pobres
La política nacional en esta materia muestra una fuerte preocupación por cambiar este panorama, pero aún no alcanza a cumplir con este objetivo

El acceso a los libros de texto en la Argentina no es para todos por igual: los menos favorecidos siguen siendo los alumnos más pobres y aquellos que asisten a la educación pública. Y esto más allá de las medidas concretas de la actual política educativa nacional por incrementar la presencia de libros en las aulas. También las diferencias se trasladan al interior del sistema, donde se privilegia la llegada del libro a los chicos del primer ciclo de la EGB.

El dato es apenas una de las muchas conclusiones a las que llegó un estudio realizado por el área de política educativa del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec), denominado "Políticas de dotación de libros en la Argentina". La autora del informe es Paola Llinás y estuvo coordinado por Cecilia Velda y Axel Rivas. En tanto que las asistentes son Claudia Composto, Mercedes Mur y Marcela Magnelli.

Los autores se preguntaron por el acceso de los libros de texto en la Argentina. Un interrogante pocas veces estudiado, en especial por la relevancia que estas publicaciones tienen en la enseñanza y en los aprendizajes.

Para conocer más sobre cómo llegan y son utilizados en las escuelas estos libros, el Cippec elaboró su propia encuesta de alcance nacional (a excepción de la Ciudad de Buenos Aires), realizada en septiembre de 2005. En sus resultados se observa una fuerte correlación entre el nivel socioeconómico de los chicos y la posesión de los libros de texto.

Los datos cobran sentido cuando se los compara con algunas conclusiones a las que arriba el estudio del Cippec: el énfasis de la actual gestión educativa nacional de dotar de libros a las escuelas y la participación de las provincias en esta materia, limitada casi a la administración de estas acciones a través de cuales llegan los libros a las aulas.

La encuesta encarada por el Cippec avanza sobre ideas centrales respecto de cómo son utilizados los libros en las escuelas y la relación con el nivel socioeconómico de sus alumnos. En principio se concluye que todas las escuelas utilizan el libro de texto, el cual está ampliamente incorporado a múltiples prácticas docentes. También que el acceso a la propiedad del libro es diferencial: es más bajo en las escuelas de nivel socioeconómico medio bajo y bajo, particularmente entre los alumnos de EGB 2.

Por otra parte se conoce que las partidas enviadas por el Estado cumplen un papel importante, llegando a 6 de cada 10 escuelas de nivel medio bajo y bajo y de zonas rurales.


Participación del Estado
El Estado tiene, a su vez, y más allá del peso de la oferta del mercado, una participación importante en la selección y compra de libros de texto. Por último, existe una clara percepción entre los directivos de las escuelas, sobre todo de las de sectores bajos, de que los libros de texto son insuficientes, especialmente en EGB 2.

Además, se observa que existe una baja cantidad de libros de texto por alumno en la Argentina, fundamentalmente en comparación con otros casos internacionales como los de México, Chile y Brasil, también abordados en el informe del Cippec (www.cippec.org.ar)

Pero el dato revelador es que "el acceso al libro de texto es poco equitativo en términos de las diferencias que se presentan en las escuelas de distinto nivel socioeconómico, pese a la colaboración de las políticas estatales para mitigar estos efectos".

También se conocen diferencias entre los distintos niveles del sistema e incluso al interior de la EGB, donde el primer ciclo se encuentra en una situación más favorable en cuanto al acceso que el segundo. Diferencias que además se perciben entre las escuelas públicas y privadas, siendo estas últimas más favorecidas en términos de acceso.

Un dato nada despreciable que se desprende de este estudio es el que importa al interior de las provincias. Es que tal como se apunta, es limitada la relevancia que en materia de dotación de libros tienen las distintas jurisdicciones. Si bien los actores provinciales involucrados manifestaron su interés y reconocieron la importancia de las partidas de libros que reciben no se han realizado acciones de acompañamiento por su parte.

Así, el informe cita el comentario de un funcionario que bien ilustra esta situación: "A diferencia de las editoriales que hacia fin de año consultan por las compras venideras, en el ámbito del Consejo Federal de Educación ningún ministro pregunta sobre este tema".

Pero hay más, también influyen en esta falta de interés y coordinación, los continuos cambios de ministros que caracterizan a las políticas educativas provinciales. En este sentido, puede recordarse el dato que el promedio que dura la gestión de los ministros provinciales es de dos años.

Los cambios influyen hasta en la manera de entender qué programas se hacen cargo de las partidas de textos que la Nación envía a las provincias. Por ejemplo, en el caso de Santa Fe, en el 2004 la distribución de estos libros estaba enmarcada en el área de políticas compensatorias y desde el 2005 en el área de planeamiento curricular.

Por otra parte, y en términos generales, se señala que son muy prolongados los tiempos que insume todo el proceso de selección, compra y distribución de los libros, a tal punto que la llegada de los libros a las aulas se concreta por el mes de septiembre. Esto implica que muchas escuelas se tome la decisión de guardar los textos para el año siguiente.

De esta forma el informe sugiere necesario revisar estas estrategias para acortar los tiempos de entrega. Además de actualizar las bases de datos que contemplan las escuelas receptoras de estas compras ya que todavía se trabaja con datos del 2001.

También y a manera de conclusión que "la dotación de libros de texto junto a otros materiales de consulta, literarios y libros para el docente; la implementación de acciones de capacitación y seguimiento; la participación provincial y docente; así como la planificación, continuidad e institucionalización de estas políticas -sumadas a la evaluación técnica separada del proceso de compra-, constituyen los lineamientos principales para mejorar las políticas nacionales de dotación de libros de texto a las escuelas argentinas".
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
Los libros enviados por el Estado cumplen un papel importante: llegan a 6 de cada 10 escuelas de nivel medio bajo y de zonas rurales.

Notas Relacionadas
El mercado editorial

Opinión: Una radiografía de lo cotidiano

Un apoyo de la tarea pedagógica

Las compras del Estado nacional


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados