|
domingo,
09 de
abril de
2006 |
Romero dice que “no se podía prever” el desastre de Tartagal
El gobernador de Salta, Juan Carlos Romero, aseguró hoy que “no se podía prever” el desastre registrado en la ciudad de Tartagal, en la que hubo inundaciones y derrumbes que obligaron a evacuar hasta el momento a unos 600 pobladores.
Asimismo, criticó que “a veces se magnifica” esta situación por “los movileros (de medios periodísticos) de la Capital”, quienes “se dan cuenta que hay pobres en el interior del país”, ironizó.
Romero afirmó que “por supuesto que no se podía prever” semejante situación, originada por el desborde del río Tartagal y el socavamiento de las barrancas, ya que “son fenómenos que suceden cada 20 años, y uno nunca sabe cuándo le van a tocar”.
“La última lluvia grande había sido en el '84, y después la gente vivió tranquila. Y hasta en Praga (República Checa) estuvieron con tres metros de agua en la zona histórica, el año pasado”, comentó el gobernador sobre la situación en Tartagal.
Además, señaló que “hay cien mil personas que no viven ningún problema (en Tartagal), y 500 familias que viven a la orilla del río”.
“Por 30 años no se conocen registros de lluvias tan grandes. Y por ese tiempo pudieron vivir tranquilos en ese lugar”, declaró el mandatario.
También sostuvo que “estamos trabajando bastante coordinados en compensar el daño, entre Nación, Provincia y Municipio”, y dijo “agradecer que no haya víctimas ni heridos” por el fenómeno. (DyN)
enviar nota por e-mail
|
|
|