Pumpido arriesgó para ganar pero se expuso hasta perder

Dispuso un esquema audaz pero su equipo no estaba para llevarlo adelante

¿Habrá sobrado demasiado Pumpido? Esa parece ser la impresión luego de observar el planteo táctico que dispuso anoche en el Coloso. Y no tiene que ver con el resultado, que obró como lógica consecuencia a la mejor producción de Lanús, sino con que a este equipo se le dio una vuelta de tuerca más de lo necesario en lo físico y lo pagó caro.

Es loable que un técnico arriesgue con un esquema para la circunstancia. Porque, ¿quién de Newell's no hubiera dado todo por una victoria que lo catapultaba a la punta en soledad? Pero Pumpido obró quizás sin medir el techo de su equipo.

Jugó con tres abajo, pero Aguirre (quién pareció no estar bien) y Rivera penaron de lo lindo con los dos delanteros que Lanús le plantó. Por derecha, Gavilán ocupaba su espacio pero retrocedía lento, mientras que Cejas se corrió a una posición más central donde se enmarañó. Por izquierda, Belluschi jamás colaboró y no sólo Biglieri hizo lo que quiso, sino Marcos Aguirre. Hasta Graieb se le animaba.

La velocidad granate denunció el desgaste rojinegro, que quedó más expuesto porque Lanús le ocupaba los huecos. Y en 12 minutos le hizo un gol y le llegó otras tres veces, denunciando que todo venía mal parido de entrada. Newell's no cambió. En el segundo se encegueció más y hasta la sacó barata con la diferencia. Como si quedara claro que arriesgar vale siempre y cuando no implique suicidarse.