Ganó por peso específico

Newell's recién le pudo torcer el brazo a Tiro en complemento

Alejandro Cachari / Ovación

Merecía ganar Newell's. Debía ganar Newell's. Estaba obligado y necesitaba hacerlo. No tenía resquicio para las excusas. Tiro sólo debía estar a la altura de las circunstancias. Por ahora es lo único que que se le puede exigir. No debería cometerse el error de subirse al tobogán ciclotímico que hace descender cualquier virtud. Hay tiempo para aclimatarse. Fue imposible no someterse al prejuicio que genera una lucha supuestamente desigual entre un recién ascendido y un equipo que viene de dar la vuelta olímpica hace menos de un año. Esa escenografía termina por maquillar una película con errores de edición y confunde a la hora de establecer méritos, defectos, bondades... El peso específico de las individualidades y la decantación que ello produce inclinaron la balanza para un justificado triunfo rojinegro por 2 a 1 en el Coloso del Parque.

Por aquello de los prejuicios, al poderoso le costó más de la cuenta torcerle el brazo a una de las Cenicientas del torneo.

Se debe consignar que para Newell's era muy difícil desentenderse del favoritismo y para Tiro mucho más cómodo asumir el papel de partenaire. En ese marco, el equipo de Castelli mostró mucha más soltura mientras el resultado estuvo de su lado. Después, se quedó sin plan b. Y Newell's, inmediatamente después del gol de Silva, a los 22' del complemento (centro recto de Belluschi que el oriental martilló de cabeza al gol), demostró que empezaba a sacarse un gran peso de encima. Por si hace falta, también se debe tener en cuenta que el jueves estará Central por la Sudamericana en el Coloso. Demasiadas presiones como para superar el estado de asfixia futbolística que genera semejante coyuntura.

Castelli sorprendió con la inclusión de Amaya en lugar de Basualdo y a los de Olmos les costó acomodarse a la sorpresa. Pero el ex Independiente y Nueva Chicago sólo mostró un par de chispazos y se desintegró.

A Tiro lo mantuvieron la gran tarea del Romero defensor, el ida y vuelta de Buján y la inquietante presencia del Romero delantero que se comió un gol increíble en la primera mitad.

Newell's no lo encontraba a Ortega, Borghello se mostraba imperfecto y Silva no recibía juego. Zapata estaba muy complicado en el medio y Belluschi batallaba a la altura de su jerarquía, aunque lo mejor lo ofreció en el complemento.

Olmos lo mandó a Ortega de punta en el complemento para zafarlo de la buena marca de Basualdo en tándem con Romero y el Burrito empezó a desequilibrar como extremo. Castelli metió a Iuvalé para equilibrar en el medio y avisó que el empate no estaba mal.

Un chispazo rojinegro le prendió fuego al libreto de los de Ludueña y el partido ya caminó por un sendero mucho más lógico de acuerdo a los antecedentes y parámetros.

Newell's necesitará compensar su juego en el medio porque Zapata está muy solo para la contención y Tiro carece de potencia ofensiva. Fue muy interesante desde lo táctico, pero cayó para el lado del mejor. Al fin y al cabo, los prejuicios tenían fundamento.

Newell's debió esforzarse para poder festejar ante el recién ascendido Tiro Federal.