El encuentro de jefes comunales cerró ayer entre debates y recorridas

Rosario sedujo a intendentes extranjeros

Se firmó un compromiso conjunto. Funcionarias de Roma y San Pablo hablaron de los problemas de sus urbes

Segundo y último día del Encuentro Latinoamericano de Intendentes: una agenda apretada, acalorados debates en múltiples idiomas y recorridos por la ciudad. Y como broche de oro, la firma conjunta del compromiso "Ciudades por la unidad". Un documento por el cual los 200 jefes comunales presentes (de Latinoamérica y algunas ciudades europeas) prometieron trabajar por "el desarrollo humano, cultural, político y económico de los ciudadanos, la descentralización del Estado, la paz social, el trabajo y la seguridad".

Así se vivió ayer la última jornada de la megarreunión organizada por el Movimiento Político por la Unidad y que tuvo como escenario un colmado Teatro El Círculo.

En la conferencia de cierre oficiaron de anfitriones la vicegobernadora María Eugenia Bielsa y el intendente Miguel Lifschitz. "Tenemos que tener en cuenta quiénes somos al pensar en un proceso integrador. Nuestra aldea se llama América del Sur", dijo Bielsa. "El desafío es transferir los ideales del encuentro en acciones concretas. Las herramientas son la participación y la fraternidad", remarcó Lifschitz.

Antes de eso y por la mañana, algunos jefes comunales y ex intendentes delinearon aspectos de la cuestión urbana y los desafíos de la democracia (ver aparte). Y sobre el mediodía se intercambiaron experiencias de gestión participativa, seguridad, políticas de desarrollo e integración latinoamericana. El debate se desarrolló en el Centro Cultural Bernardino Rivadavia.

Los invitados se fueron no sin antes halagar a Rosario. Hasta se escuchó decir a una ex intendenta de Brasil: "No está mal pensar en esta ciudad para vivir".