Tensión en el PJ provincial por pelea entre Obeid y Reutemann

El senador se habría enojado con el gobernador por los continuos ataques de éste a Aguas Provinciales

Carlos Morán-Marcelo Carné-Jorge Sansó de la Madrid / La Capital

El fuerte enojo de Carlos Reutemann, generado por el desenlace que el gobernador Jorge Obeid le imprimiera a su conflictiva relación con Aguas Provinciales, se convirtió en las últimas horas en una indisimulable pelea cuyo corolario fue el declarado abstencionismo del senador en el armado de listas de candidatos a concejal y que tendría como consecuencia más inmediata el alejamiento del único ministro reutemista de la actual gestión provincial, Alberto Hammerly, a cargo de la cartera de Obras y Servicios Públicos.

"Hagan lo que quieran, yo no voy a avalar a nadie". De este modo el Lole precipitó su decisión de no integrar con su gente la lista "oficial" de candidatos a concejal por Santa Fe y Rosario y de ceñir su participación electoral al apoyo de la futura lista de candidatos a diputado nacional del PJ santafesino que se propone consensuar en días más con el presidente Néstor Kirchner, tal como ambos acordaran la semana pasada durante una entrevista reservada.

La creciente tensión que sobrevino al cierre de listas de la medianoche del lunes evidencia un cimbronazo en el peronismo cuyo epicentro más remoto fue ubicado por algunos en la obcecación de Obeid de haber derogado la ley de lemas pese a la reticencia de la mayoría partidaria, a lo que se habría sumado ahora la caída de la concesión del servicio de agua potable y cloacas que había privatizado Reutemann en su última gestión.

De tal magnitud sería el cortocircuito, que las versiones que ayer ganaron inusitada fuerza en la capital provincial hablaron de un inminente alejamiento de Hammerly del gobierno, aunque esto fue negado por el propio funcionario: "No he renunciado y, además, nunca he querido mezclar lo institucional con lo político partidario", expresó Hammerly.

Desde las trincheras del reutemismo se afirma que "al Lole no se lo considera como lo que es, el gran elector del peronismo en la provincia", y que ha habido gestos de Jorge Obeid que habrían colmado la paciencia del senador nacional, fundamentalmente la decisión del mandatario de romper con Aguas Provinciales. A Reutemann le molesta en grado sumo que se ataque la concesión que fuera establecida durante su mandato.

Sin embargo, otro vocero del ex gobernador minimizó el tema y dijo que la "prescindencia" de Reutemann en las internas partidaria obedece a una estrategia elaborada en conjunto con la Casa Rosada (ver aparte).


Gestos
En realidad, el ex mandatario mantiene su habitual "silencio de radio", propio de los momentos de máxima tirantez política, pero -como también es habitual en él- hay que fijarse en sus gestos. Por ejemplo, el que no haya asistido a la Asamblea Legislativa del 1º de mayo pasado, cuando Jorge Obeid leyó su tradicional mensaje, centrado precisamente en sus críticas a la concesionaria del agua potable y las cloacas en 15 ciudades de la provincia.

Todo indica que el Lole habría sido informado con antelación que el mensaje de Obeid tendría esa intencionalidad y en consecuencia habría decidido quedarse en su casa de Guadalupe, o en su campo de Llambi Campbell, donde suele recluirse cuando arrecia la tormenta.

Pero fue en el cierre de listas de concejales, intendentes y presidentes comunales, en la noche del lunes, donde se evidenció la nueva ruptura (hay quienes así denominan a este nuevo capítulo del sempiterno cortocircuito entre reutemistas y obeidistas). Ayer circuló insistentemente la versión de que el propio Reutemann se comunicó con Hammerly, quien venía negociando una difícil lista de unidad con el obeidismo en la ciudad de Santa Fe, para hacerle saber que había llegado el momento de interrumpir las negociaciones. Consultado el ministro de Obras y Servicios Públicos por La Capital, desmintió la existencia de la llamada y precisó que las negociaciones habían concluido en realidad el domingo pasado por la noche.

Hammerly no explicó cuáles fueron los motivos concretos de la ruptura, pero no faltó quienes indicaran que no terminaron de convencer los nombres del obeidismo. Sin embargo, desde la trinchera del gobernador hubo ofertas amplias, porque en realidad temían que Reutemann armara una lista propia que les despertaba considerables temores. Los reutemistas no dejaron de recordar lo que significó para Obeid la interna de 1997 que perdió ante el senador nacional "y de la que no puede olvidarse".

En tanto, el reutemismo admite estar expectante sobre los resultados que arrojará el nuevo sistema de internas abiertas, simultáneas y obligatorias a aplicarse por primera vez en agosto venidero. Al respecto, la senadora nacional Roxana Latorre aceptó que el nuevo sistema plantea, "como mínimo", un gran signo de interrogación.

La dirigente rosarina recordó que desde el sector del senador nacional hubo muchas voces que defendían el mantenimiento de la ley de lemas, con reformas. "Ahora el nuevo sistema nos crea expectativas, es un sistema experimental que queremos ver cómo funciona, también nos interesa saber cómo actuará el electorado independiente, si será mayor o menor su participación".

La legisladora añadió que desde el reutemismo se quiere "que las mejores mujeres y los mejores hombres del justicialismo ocupen los cargos y tememos que el sistema nuevo los termine perjudicando, de manera que estamos muy a la expectativa", reiteró.

Otras voces, que pidieron mantener el anonimato, señalaban anoche que "la guerra existe, aunque no está declarada" y que Reutemann está de verdad "muy enojado" con el gobernador al punto de haberse animado a calificar esta instancia de "irreversible".

Producción periodística:

Carlos Roberto Morán, Marcelo Carné

y Jorge Sansó de la Madrid.

La situación de Aguas Provinciales se coló en la interna entre Obeid y Reutemann.