El sala ganó después de 56 años en la Isla Maciel

Argentino ganó y todavía sueña

Derrotó claramente 2 a 0 a San Telmo

Gustavo Yarroch / Ovación

Tuvo que pasar más de medio siglo, precisamente 56 años, para que Argentino volviera ganarle a San Telmo en la Isla Maciel. Pero más que un valor estadístico o histórico, el 2 a 0 cobra vigor por dos cuestiones fundamentales. Primero y principal, porque los salaítos están obligados a conseguir casi la totalidad de los puntos que le quedan en juego (18) para escaparle al descenso. Y, en segundo lugar, porque llegarán con el pecho inflado al clásico del martes con Central Córdoba.

A contrapelo de lo que suele ocurrirle a los equipos tan comprometidos, Argentino jugó con una gran tranquilidad. El costado positivo de esa inclinación a la cultura zen fue que nunca perdió la calma, ni aún en los momentos en que San Telmo manejó la pelota. Tuvo paciencia y supo esperar los momentos para golpear. Pero también puede hacerse una lectura negativa de esa forma de jugar, ya que de a ratos dio la sensación de que Argentino había perdido de vista que no le servía otro resultado que una victoria.

El problema de los salaítos durante buena parte del primer tiempo fue que sus volantes retrocedieron demasiado y, entonces, cuando recuperaban el balón el arco rival les quedaba demasiado lejos. Así y todo, dispusieron de tres chances para marcar: dos en los pies de Maldonado, quien volvió a mostrar cierta desidia en un par de jugadas que pedían mayor decisión, y la restante en la cabeza de Díaz.

Al primer gol, una obra de colección en el arranque del segundo tiempo, lo firmó Ramírez, quien dejó dos rivales en el camino y la clavó en un ángulo desde afuera del área. San Telmo, que enseguida metió dos cambios ofensivos, merodeó el empate en un par de ocasiones. Como contrapartida, Argentino reforzó la zona de contención con la entrada de Juan Sánchez por Ramírez. La victoria corría riesgos, pero Argentino lo liquidó en una contra muy bien resuelta: centro de Díaz y cabezazo de Maldonado.

Argentino volvió a ganar y sueña. Está apretado, pero si sigue sumando de a tres, ¿quién te dice?.