La vieja capilla, en "capilla"

La sala de lectura, hoy cerrada, posee ventanales con vitraux y arcos góticos de pared a pared. En ella leen diariamente 170 personas (el 86 por ciento son estudiantes). Pero este mes la actividad se suspendió por una profunda grieta en el techo. Los textos se ubican en polvorientas estanterías, las estufas se prenden con un palo y una vela, en un rincón hay tres boxes para informática con sólo una computadora, desenchufada. Hay dos baños, uno clausurado y un depósito donde habitan ratas.

Una sala de lectura con vitrales y arcos góticos